Los agentes realizaron inspecciones en un total de 11 centros autorizados de tratamiento de vehículos (CAT) en la provincia
En el marco de la Operación SACATCYL23, el Servicio de Protección a la Naturaleza (SEPRONA) de Salamanca ha llevado a cabo un seguimiento exhaustivo para garantizar la correcta gestión de los gases fluorados utilizados en los sistemas de refrigeración de vehículos. Esta operación forma parte de los planes operativos anuales, conocidos como “KEISAH”, que buscan detectar el tráfico ilegal o irregular de gases refrigerantes de efecto invernadero a nivel nacional e internacional.
Durante el último año, los agentes de la Guardia Civil realizaron inspecciones en un total de 11 centros autorizados de tratamiento de vehículos (CAT) en la provincia. Se revisaron documentalmente más de 10.000 vehículos, y se identificaron graves incumplimientos de la normativa medioambiental en 3 de estos centros. Las irregularidades detectadas abarcaron tanto la gestión física como documental de los vehículos al final de su vida útil (VFVU), especialmente en lo que respecta a la inadecuada manipulación de los gases refrigerantes de los sistemas de aire acondicionado de vehículos dados de baja.
Como resultado de estas investigaciones, cuatro personas han sido identificadas como presuntas responsables de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente. Gracias a estas acciones, se ha evitado la emisión de más de 3.600 toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, contribuyendo así a la protección de la capa de ozono y a la lucha contra el calentamiento global.