Desde Salud Mental Salamanca trabajan para acompañar a las personas y "desmontar el autoestigma" y a su vez formando a las empresas
En el Día Mundial de la Salud Mental un problema social que existe es la insercción al mercado laboral de personas que tienen algún tipo de problema de salud mental.
Olga de Dios Armenteros, técnica de insercción socio laboral en Salud Mental Salamanca, trabaja desde hace años por conseguir que estas personas accedan a un pusto laboral. "Desde el trabajo integral que hacemos intentamos mejorar su calidad de vida y para ello el trabajo es un elemento fundamental. El tener una insercción laboral aporta un desarrollo personal importante y a la vez una insercción social que es complicada para personas que tienen un problema de salud mental", explica.
Al programa que desarrollan llegan muchas personas con problemas de salud mental y "los procesos de insercción son importantes para que la persona se sienta parte de una sociedad, que se empodere y así se pueda desarrollar como persona, porque el trabajo aporta muchas cosas: estabilidad económica, organización, orden en su día a día, una posibilidad de aprendizaje, etc".
La empleabilidad para estas personas es compleja. "Hay mucho estigma y hay que hacer un trabajo de sensibilización tanto con las personas como con las empresas . Ha habido vances, pero es algo que va muy lento. El estigma es muy grande y hay mucha falta de información", afirma la profeisonal.
Por ello trabajan co dos enfoques. "Por un lado con el estigma de la propia persona, a quien hay que acompañar y desmontar el propio autoestigma es una parte importante; y por otro lado, la empresa, el curso de formación también hay un estigma que hay que trabajar".
"Es muy importante que exista ese apoyo personalizado donde se ponga sobre la mesa que hay un problema de slaud mental y lo que ello conlleva, hacerlo de una forma abierta y buena. Tener un problema de salud mental condiciona la vida y condiciona la búsqueda de empleo", concluye.