Critican la falta de estudios científicos que cuantifiquen el impacto de estas emisiones y la necesidad de realizar un análisis exhaustivo de los gases y aguas contaminadas
Un grupo de vecinas y vecinos de Villamayor se han concentrado ante la Delegación de la Junta en Salamanca con el fin de denunciar la problemática ambiental y de salud pública generada por la emisión de olores y gases de una fábrica de grasas ubicada en Gudino.
Manuel Pérez, presidente de la plataforma 'Cuidamos', destacaba la falta de estudios científicos que cuantifiquen el impacto de estas emisiones y la necesidad de realizar un análisis exhaustivo de los gases y aguas contaminadas. Además, mostraba su preocupación por otros proyectos industriales en la misma zona, lo que podría agravar la situación.
Los manifestantes criticaban la proximidad de estas fábricas a núcleos urbanos y la insuficiencia de las normativas actuales. Por eso, la plataforma ha solicitado a la Junta de Castilla y León que tome medidas, incluyendo un posible cierre temporal de las actividades contaminantes.
Además, destacaban la importancia de la unión de diferentes comunidades afectadas por problemas similares con el fin de visibilizar la situación para evitar que Salamanca se convierta en un "basurero".
Actualmente no hay evidencia científica cuantificada sobre el impacto de los olores y gases emitidos por la fábrica de grasas. Por eso, argumentan que la Universidad de Salamanca tiene la capacidad para realizar estudios sobre las emisiones de gases y la calidad del agua en la zona afectada y planean realizar un estudio puntual sobre los gases y aguas contaminadas, aunque reconocen que se necesitaría un análisis más prolongado.
La situación, además, se hace más grave porque existen tres proyectos industriales adicionales en la misma área, lo que podría aumentar la contaminación. Una de las fábricas proyectadas tiene una capacidad de 280.000 toneladas, lo que plantea serias preocupaciones ambientales.
La proximidad de las fábricas a núcleos urbanos es "inaceptable", según explicaban, ya que las normativas sugieren una distancia mínima de 4 a 5 kilómetros. Además, el Procurador del Común ha emitido un informe que respalda la necesidad de cumplir con las normas de seguridad, según recordaba la citada plataforma.
Por eso, se ha propuesto un cierre temporal de las actividades contaminantes hasta que se resuelvan los problemas detectados. Y es que, la población de Villamayor, con aproximadamente 7.500 censados, es una de las más afectadas por la contaminación. Además, los olores generados por la fábrica de grasas han llegado hasta Salamanca capital, afectando a la calidad de vida de sus habitantes.
La plataforma "Cuidamos" se ha constituido para abordar el problema de los olores y la contaminación en la región. La situación de contaminación se ha intensificado durante el verano, pero es un problema que se arrastra desde hace años. Se han detectado deficiencias en la combustión y emisión de gases por parte de la fábrica, según informes de la Junta de Castilla y León.