La capitana del CB Perfumerías Avenida destacó su estrecha vinculación con la ciudad y reconoció que "vivo este momento sintiendo una emoción especial"
Buenas tardes salmantinos, salmantinas, amigos y visitantes que tenéis la oportunidad de estar hoy aquí disfrutando de esta maravillosa ciudad. Muchas gracias a todos por acompañarme en un día como hoy en este marco tan incomparable como es nuestra magnífica Plaza Mayor.
En primer lugar, quería agradecer a nuestro alcalde Carlos Manuel García Carbayo y a toda la corporación municipal de Salamanca por haberme dado la enorme oportunidad de poder ser la pregonera de las Fiestas y Ferias de Salamanca 2024.
Es cierto que he tenido la suerte y el privilegio de salir a este balcón en numerosas ocasiones para ofrecer a esta ciudad algunos de los éxitos deportivos cosechados con Perfumerías Avenida, pero hoy vivo este momento sintiendo una emoción especial y a la vez una gran responsabilidad en saber expresar de manera elocuente todo lo que siento por Salamanca.
Tengo que reconocer la inmensa alegría que sentí el día en que recibí esa inesperada llamada del alcalde informándome de la propuesta para ser la pregonera de las Fiestas de este año y que aumentó cuando días más tarde se anunció de manera oficial y recibí de ese modo una enorme oleada de cariño de muchos salmantinos, pero también de diferentes amistades de muchos otros lugares que tanto se alegraron por mí conocedores del enorme cariño que guardo a Salamanca.
Quizás el privilegio de poder ser hoy la pregonera aumenta esa responsabilidad que siento tras ver los ilustres nombres que han tenido la oportunidad de ser pregoneros anteriormente, y en mi caso, hacerlo además sin ser charra de nacimiento, pero os puedo asegurar que siéndolo en gran parte de corazón.
Buena de muestra de ello es poder tener a mi familia hoy aquí, a los que tanto tengo que agradecer, que se han desplazado desde Barcelona para poder acompañarme en este día tan importante, siendo para ellos también muy especial la ciudad de Salamanca.
Como un buen amigo me dijo una vez, una nunca debe olvidar sus orígenes porque son sus raíces, pero he tenido la gran suerte de pese a estar a cientos de kilómetros de mis orígenes haber encontrado aquí en Salamanca mi sitio y haberlo convertido también en mi hogar.
Nací en Montgat, un pequeño pueblo de la costa de Barcelona, pero el destino quiso que a los 19 años Salamanca se cruzase en mi camino ofreciéndome el ilusionante reto de formar parte de uno de los mejores clubes de baloncesto nacional.
Recuerdo como si fuese ayer el primer día que llegué a Salamanca, mi primer entrenamiento en el pabellón de la Alamedilla, el primer partido oficial en el pabellón de Würzburg, y por supuesto la primera vez que me quedé sin palabras al salir a este balcón, ver una plaza abarrotada y experimentar lo que de verdad significa tener a toda una ciudad volcada con su equipo y sentir la responsabilidad de representar con orgullo a Salamanca por toda España y por toda Europa.
18 años después puedo decir que me siento enormemente orgullosa de haber formado parte de la historia del club de baloncesto femenino más laureado a nivel nacional y de haber formado parte de su historia de manera significativa representando a esta ciudad e intentando siempre estar a la altura.
Mi etapa deportiva en Salamanca no fue continua desde ese primer día hasta el día de hoy ya que separé nuestros caminos durante 4 temporadas afrontando otros ambiciosos proyectos deportivos, pero a nivel personal mi conexión con esta ciudad siguió siendo muy patente y siempre que tuve una pequeña ocasión aproveché para seguir haciendo visitas. Por esa razón tomé la decisión de volver e iniciar una segunda etapa a nivel profesional en el que sin duda es el equipo de mi vida. Quiero dar las gracias públicamente a todos los integrantes que forman o han formado parte del club Baloncesto Perfumerías Avenida que apostaron por mí y me dieron la oportunidad en esos años y siguen dándome en el presente el privilegio de poder seguir vistiendo la camiseta que con tanto orgullo defiendo.
Aún así seguramente la victoria más grande y en parte por la que estoy hoy aquí en este balcón no se trata únicamente por haber desarrollado mi trayectoria deportiva aquí, si no que Salamanca significa mucho más.
Salamanca me ha hecho madurar, me ha ayudado aprender, me ha formado deportiva y personalmente y ha contribuido a que haya podido vivir experiencias únicas creando unos lazos con esta tierra que ya formaran parte de mí para siempre.
Aquí he podido conocer a personas maravillosas dispuestas a ayudarme, que me han apoyado, con las que he compartido muchos momentos y han pasado a formar parte de un círculo de amistades muy importante para mí.
Formar parte del club de Perfumerías Avenida durante 15 temporadas me ha permitido ser integrante de diferentes plantillas de una diversidad cultural notoria.
Esa riqueza cultural que me ha rodeado ha hecho que año tras año haya tenido la oportunidad de mostrarles a mis compañeras, muchas de ellas de otras nacionalidades, la ciudad de Salamanca. Y siempre acabo llegando a la misma conclusión: Salamanca enamora.
Y es que tengo que decir que querer mostrar Salamanca a los que me rodean ha hecho que me detenga a ver esta ciudad continuamente y haya podido ir descubriendo un nuevo encanto en muchos de sus rincones. No solo es la belleza de la Plaza Mayor, de sus Catedrales, de la singular Casa de las Conchas, de uno de mis rincones favoritos como es el Huerto de Calixto y Melibea, de los tranquilos paseos por las orillas del río Tormes y su puente romano. Es explicarles que Salamanca tiene la Universidad en activo más antigua de España con más de 800 años de historia, hablarles de su riqueza en patrimonio histórico y cultural, es la calidad de vida que atesora… Enseñarles todo lo relacionado con esta ciudad va mucho más allá pero no os puedo negar que las preguntas más recurrentes de mis compañeras de oficio suelen estar relacionadas con la oferta gastronómica, y ahí Salamanca tiene mucho que ofrecer. Así que ya para ahorrarme tiempo dispongo de una lista de recomendaciones que año tras año solo hace que aumentar y subir de nivel y es una de las cosas que comparto con ellas en cuanto empezamos la temporada. Como anécdota os diré que salvo alguna excepción que se me resiste, os aseguro que ninguna de mis compañeras se va de Salamanca sin probar el hornazo como mínimo una vez al año en el tradicional lunes de aguas.
No quiero alargarme mucho más pero no me gustaría finalizar mi pregón sin compartir una de mis inquietudes. Como yo seguramente muchos de aquí sois padres, madres o tenéis familiares de generaciones con todo un futuro muy prometedor por delante. Siento que tenemos la enorme responsabilidad de seguir cuidando esta maravillosa ciudad y transmitirlo así a esas futuras generaciones. Seguir potenciando su cultura, sus tradiciones, su desarrollo, pero también seguir luchando por un futuro mejor en forma de una educación por y para todos, fomentando el respeto y exigiendo la igualdad y la creación de oportunidades. Todos nosotros somos responsables de aportar nuestro granito de arena para construir una mejor Salamanca.
Salmantinos, salmantinas, estad orgullosos de la ciudad que tenéis, de esa riqueza cultural, de su patrimonio y de su gente porque todo ello es un tesoro.
Por último, quería desearos a todos unas Felices fiestas, rodeados de vuestros familiares y amigos, disfrutando de las casetas, los espectáculos, los diferentes conciertos, las diferentes actividades deportivas y muchas otras actividades programadas.
¡Viva la Virgen de la Vega!
¡Viva Salamanca!