Entre enero y agosto de 2024, las roturas se han reducido un 12,5% respecto al mismo periodo del año pasado; si se compara este dato con el acumulado antes de la puesta en marcha del sistema de Gestión Activa de Presiones (GAP), la reducción es del 54,47%
El Ayuntamiento de Salamanca concluye la renovación de la red de distribución de agua para prevenir la rotura de tuberías y mejorar la calidad del servicio que se presta a los ciudadanos. En la avenida de Maristas, entre las calles Arapiles y La Vellés, se han renovado 384 metros lineales con una inversión de 127.000 euros. Estos trabajos se han desarrollado una vez concluido el curso escolar para no afectar a las familias durante las horas de entrada y salida de los alumnos.
La red de distribución de agua de esta avenida contaba con una antigüedad superior a treinta años, con materiales que actualmente no se utilizan y que presentaban un estado de conservación degradado. En dicha zona la información del Servicio Municipal de Aguas indicaba que en los últimos años se venían produciendo episodios de fugas y roturas de diversa índole y alcance, con el consiguiente perjuicio para los ciudadanos.
La renovación de las redes de distribución de agua se ha realizado mediante la construcción de una nueva red conformada por tuberías de materiales modernos y más resistentes de 150 y 200 milímetros de diámetro.
También se han ejecutado las conexiones a las calles adyacentes instalando válvulas de corte para sectorización de la red y se han renovado las acometidas domiciliarias, instalado bocas de riego, hidrantes contraincendios así como pozos de desagüe, así como ventosas en los puntos altos de la red a fin de evacuar el aire de las conducciones y desagües en los puntos bajos al objeto de permitir el vaciado de las tuberías en caso de avería. En puntos estratégicos se han colocado hidrantes contra incendios, necesarios para cumplir con la normativa al efecto.
Con este proyecto, más los ejecutados en el Paseo de la Estación y en las calles Santa Rita y La Misión del barrio Blanco, el que actualmente se lleva a cabo en la Carretera de Ledesma y los previstos en Chamberí, La Vega y Gran Capitán, la renovación de tuberías durante el actual mandato se acercará a los 9 kilómetros de longitud en 32 calles con una inversión total en torno a 2,5 millones de euros.
Estas mejoras se suman a su vez a la fuerte inversión ejecutada por el Ayuntamiento de Salamanca durante el mandato anterior, cuando se renovaron cerca de 21,5 kilómetros de tuberías en 106 calles de la ciudad con más de 8,7 millones de euros.
La renovación de la red de abastecimiento de agua desde la puesta en marcha del sistema de Gestión Activa de Presiones (GAP) en 2017 ha propiciado un ahorro neto superior a 16 millones de metros cúbicos de agua, lo que equivale al suministro para toda la ciudad de Salamanca durante un año.
Las mejoras no sólo han permitido sustituir las tuberías actuales y ahorrar agua, mejorando el servicio para los vecinos, sino que además evitan las molestias como consecuencia de las roturas en la red. Entre enero y agosto de 2024, las roturas se han reducido un 12,5% respecto al mismo periodo del año pasado. Si se compara este dato con el acumulado antes de la puesta en marcha del GAP, la reducción es del 54,47%.
Gracias a este sistema inteligente, que regula la presión en la red cuando hay menor demanda de agua y optimiza esta presión según demanda, aumenta en dieciséis años la vida útil de las tuberías. El GAP se controla desde la potabilizadora, hasta cuyo centro de mando y visualización, desde donde profesionales del Servicio de Aguas de Salamanca coordinan este sistema inteligente, llegan a diario más de 27.000 datos que permiten tener monitorizada la red de forma permanente para mejorar la calidad del servicio evitando averías, minimizar las perdidas y los sectores afectados en el caso de producirse las mismas.