Daniel Asensio, propietario del Restaurante Grana y Oro, asegura que "todo el personal está dado de alta con las horas que trabajan y sus descansos, con un sueldo digno cumpliendo la normativa"
Tras la noticia publicada ayer por SALAMANCArtv AL DÍA en el que un restaurante de Salamanca anunciaba que se veía obligado a cerrar su restaurante por la tarde tras no encontrar personal cualificado, las críticas no han cesado a este empresario salmantino y hoy habla con este medio para explicar los motivos de sus declaraciones. "Mi frase de que 'Gracias a las paguitas no nos queda otra' no era para nada ofensivo, no me refería a esas personas que están en el paro y necesitan esa ayuda, si no que me refería a esos jóvenes o no tan jóvenes que cobran 400 euros de ayudas y prefieren eso y estar en casa que tener un sueldo decente según define el convenio colectivo del sector de la hostelería. Todo mi personal está dado de alta con las horas que trabajan y sus descansos, con un sueldo digno cumpliendo la normativa, y cuándo quieran puedo enseñar sus nóminas porque tengo las conciencia muy tranquila", explica Daniel Asensio, propietario del Restaurante Grana y Oro.
Y añade: “No entiendo las críticas por decir una verdad. Dije lo que mucha gente piensa, y me gustaría que todos aquellos que ayer me insultaron se den de alta como autónomos, y que sean capaces de sobrevivir todos los meses con 6 empleados, pagando más de 3.000 euros cada mes solo en Seguridad Social, más luz, etc. y pagando más de 7.000 euros en nóminas. Es durísimo lo que está pasando en este país con los autónomos, nos están agobiando a pagos”.
Por último, agradece a los clientes de siempre y a su familia el apoyo. "Me quedo con la gente que me conoce de verdad, a mis amigos, a los clientes, a mi familia y a mi plantilla porque sin ellos no soy nada", concluye.