La res fue donada por el colectivo de emprendedores de la localidad
Segundo día de fiesta oficial desde que sonara el chupinazo que diera salida a las fiestas de San Buenaventura en la localidad cacereña de Moraleja.
La jornada del viernes comenzó a la cinco de la madrugada con el toro del aguardiente y un encierro a la una de la tarde con cuatro toros de la ganadería portuguesa Núñez de Tarifa.
Durante todo el día el ambiente callejero estaba protagonizado por las peñas que organizan sus fiestas a la que todo el mundo con buenas intenciones es bienvenido.
Tras la novillada en la plaza portátil, la tarde vespertina del viernes, estuvo animada con la suelta de un cuatreño negro listón de la ganadería de Alcurrucén con pastos en Cáceres, Toledo y Córdoba, que ha sido donado por el colectivo de emprendedores de Moraleja.
El toro muy bravo y con mucha inteligencia, en un principio no quiso dejar el suelo de arena de la Plaza de España donde tenía su salida.
Los mozos pudieron sacarlo de su sitio de confort, conduciéndolo hasta las calles aledañas donde el animal solamente optaba por defenderse sin echar carreras, que es lo que divierte al aficionado de estos eventos taurinos tradicionales.
Finalmente, hubo que obligar al animal mediante una soga para introducirlo en la plaza de toros, donde ya el solo entró a chiqueros.