Se trata de los hayedos leoneses de Cuesta Fría y los de Canal de Asotín, ambos ubicados en Picos de Europa, y el hayedo de Riofrío de Riaza, en la provincia de Segovia
La comunidad tiene espacios naturales inigualables, y prueba de ello son los 3 bosques de hayas que son Patrimonio Mundial por la Unesco desde 2017. Se trata de los hayedos leoneses de Cuesta Fría y los de Canal de Asotín, ambos ubicados en Picos de Europa, y el hayedo de Riofrío de Riaza, en la provincia de Segovia.
El haya es un árbol fuerte que sobrevivió a la era glacial gracias al refugio que encontró en zonas aisladas. Eso les permitió protegerse de los bruscos cambios climáticos y llegar hasta nuestros días. Miles de años después, permanecen a nuestro lado para asombrarnos con su belleza y su incalculable valor. En Castilla y León, destacan por su buen estado de conservación los de Cuesta Fría y Canal de Asotín en Picos de Europa.
Estos bosques han sido testigos, durante cientos de miles de años, de la evolución de nuestros parajes. Ahí radica su alto valor, al que se le suman su belleza y significado, que los hacen dignos de ser visitados y pasear por ellos.
El hayedo de Cuesta Fría se ubica en una abrupta ladera, en la divisoria entre los ríos Cares y Dobra. El viaje nos lleva a conocer la histórica Senda del Arcediano, una de las rutas cantábricas más impresionantes.
Su extensión, estado de conservación y sus espectaculares hayas han hecho que este alejado bosque del Parque Nacional de los Picos de Europa sea declarado como uno de los hayedos más representativos del continente europeo.
Sus hayas son testigo de lo que ocurría en el mismo territorio, pero hace cientos de miles de años. Curiosamente el árbol más reconocido del hayedo de Cuesta Fría es un imponente roble, conocido como el Roblón de Cuesta Fría, cuyo perímetro alcanza los 7 metros.
La forma más fácil de acceder a Cuesta fría es a través de la Vega de Vegabaño, desde la población de Soto de Sajambre, localidad situada en el vecino municipio de Sajambre.
Por otro lado, en los propios Picos de Europa, reserva de la Biosfera, se encuentra el hayedo de Asotín. El acceso al bosque es exigente, recomendable solo para montañeros con experiencia o lugareños familiarizados con el terreno. Probablemente su remota ubicación le ha ayudado a permanecer inmutable durante siglos. Hoy en día, cuenta con ejemplares centenarios y se convierte en un refugio de sombra perfecto para los senderistas que suben a Collado Jermoso.
En el sur de la Comunidad nos aguarda el hayedo de Riofrío. Ubicado en el macizo de Ayllón, en la provincia de Segovia, destaca por su interés biogeográfico, como punto de estudio y de obligada visita para comprender el mundo de la flora peninsular. Serbales, robles, acebos, abedules y tejos acompañan a las hayas y enriquecen aún más este privilegiado espacio, un grandioso lugar natural que cuenta con más de 1930 hayas repartidas en 1030 hectáreas.
Como suele sucederles a otros bosques, la mejor época para visitarlo es en otoño, cuando el follaje de las hayas se desviste de su verde intenso y se atreve con su manto de fiesta cromática en tonos amarillos, naranjas y ocres. El espectáculo visual está garantizado. La primavera, no obstante, también es buena época, ya que ofrece un verdor de lo más alegre.
Además, para completar la jornada, se recomienda tras esa ruta la visita turística a la zona conociendo los rincones de la hermosa villa de Riaza, ubicada a poco más de 9km del lugar, que está llena del más típico sabor de la arquitectura popular serrana. Su riqueza ecológica, junto a su historia, arte y patrimonio hacen de Riaza una villa para visitar en cualquier época del año.