Propietario de una tienda de alimentación, asegura que la actitud de los estudiantes está haciendo mella en el negocio que le da de comer
Desesperado. Así es como se encuentra Alberto, un comerciante de la calle San Mateo, en el centro de Salamanca. Propietario de una tienda de alimentación, denuncia la situación de amenazas que está sufriendo por parte de unos menores.
“Se trata de alumnos pertenecientes al Colegio que está al lado", explica en declaraciones a SALAMANCA AL DÍA. Lleva seis años al frente de este negocio, asegura que desde el principio la situación se repite, aunque ahora vuelve con más fuerza.
“El primer año terminé en el juzgado con una madre y un niño por tema de robos, consiguiendo una orden de alejamiento. Había varios menores que me robaban en la tienda y fui a hablar con la directora, pero la situación quedó igual”, explica. “Al final no le dijeron nada a los niños”.
Pero la cosa no termina ahí. “Increpan a los clientes, en alguna ocasión se han encarado a ellos, les dicen que no compren aquí, etc. Una vez entraron detrás del mostrador mientras me insultaban ‘hijo de puta’, ‘me cago en tus muertos’… Gracias a Dios entró un chico joven que era policía local, y me dijo que lo había visto todo su compañero”.
Durante este curso escolar, de nuevo, los robos y también aparecen los billetes falsos. “Un día me colaron un billete falso de 10 euros, y otro día uno de 50 euros, pero a este me di cuenta a tiempo. Se lo fui a decir a los profesores, pero como si nada”, asegura.
Explica que ha ido a hablar con la dirección del colegio pero que no le dicen nada, creen a los menores. “Y ahora les han prohibido a todos los alumnos que vengan a comprar aquí”, asegura. “Y no generalizo, hay alumnos que son buenos, que vienen a comprar y que les acabas cogiendo cariño”, concluye.