Con la participación de asociaciones como ASPAS, ASPACE, ASPRODES, INSOLAMIS, AFIM, ARIADNA, ASPAR La Besana o AVIVA
El Centro Municipal Integrado Victoria Adrados, ubicado en la avenida Villamayor, ha acogido esta mañana un acto organizado Entreculturas con el que culminaba la Semana Mundial por la Educación y en el que destacó la lectura del manifiesto que expresa su compromiso para frenar los discursos de odio.
Al encuentro asistieron representantes de asociaciones como ASPAS, ASPACE, ASPRODES, INSOLAMIS, AFIM, ARIADNA, ASPAR La Besana y AVIVA, así como colegios que han participado en la redacción del manifiesto como San Estanislao de Kostka.
También estuvieron presentes la subdelegada del Gobierno en Salamanca, Rosa López; el director provincial de Educación, Ángel Miguel Morín; la directora de Voluntariado de la UPSA, María Eugenia Polo González, entre otras autoridades.
En la última década los discursos de odio se han extendido más rápido y más lejos que nunca como resultado del crecimiento de la desinformación en las redes sociales y el aumento de la polarización y el populismo. Tanto online como offline, los discursos de odio discriminan a personas en base a prejuicios negativos y tienen el potencial de generar violencia y propagar ideologías extremistas. Un alcance que ha llegado incluso a las propias aulas de las escuelas, donde esta retórica puede afectar especialmente a niños y niñas, que disponen de menos herramientas críticas.
Ante esta situación, la Campaña Mundial por la Educación (CME), coalición liderada en España por las organizaciones Ayuda en Acción, Educo, Entreculturas y Plan International, ha decidido dedicar su 21ª Semana de Acción Mundial por la Educación (SAME) a combatir la proliferación de discursos de odio en las aulas. Para ello, entre el 22 y el 28 de abril, más de 1000 alumnos y alumnas de siete Comunidades Autónomas se movilizarán. En Salamanca, el próximo jueves el trabajo en las aulas se trasladará a la sociedad, para reivindicar la Educación Transformadora para la Ciudadanía Global (ETCG) como la herramienta crucial para combatirlos, como defiende la CME en sus materiales educativos. Representantes de las asociaciones ASPAS, ASPACE, ASPAR La Besana, AVIVA y el colegio San Estanislao de Kostka se sumaron a la lectura del manifiesto de la coalición.
Para la CME este proceso socioeducativo es crucial en un momento donde solo un 7% del alumnado en los países de la OCDE alcanza un nivel de competencia suficiente para discernir entre hecho y opinión, según los últimos resultados del informe PISA. Así lo señala Mariluz Aparicio, coordinadora de la CME en España, que recalca cómo “la Educación Transformadora para la Ciudadanía Global permite que el alumnado de todas las edades tome decisiones informadas, a la vez que detecta las causas y mitiga las consecuencias de los discursos de odio en el ámbito educativo”.
Para conocer de primera mano la situación dentro de las escuelas, la CME ha realizado una encuesta al profesorado en la que han participado más de 140 educadores y educadoras de 13 comunidades autónomas. En Castilla y León han participado un total de 36 docentes.
Defender una educación que pueda capacitar a toda la comunidad educativa para ser capaz
de examinar, cuestionar y cambiar las construcciones sociales y culturales negativas es otro de los objetivos que impulsa la SAME este año, bajo su lema “Transforma-T para (con)vivir”.
Una meta necesaria, señalan desde la CME, para construir narrativas transformadoras de convivencia y de pluralidad que lleguen a toda la infancia y juventud, para combatir situaciones de discriminación y violencia, y así darles la oportunidad de construir un mundo más justo, pacífico y cohesionado.
Esta atmósfera de animadversión actual, que llega a impregnar el día a día en las escuelas, es una de las principales inquietudes del profesorado: “Los discursos de odio generan un modelo social excluyente y segregador, dividido en buenos y malos, en los míos y los contrarios. Son el caldo de cultivo ideal para vencer, controlar y explotar a la población” uno de los docentes encuestados.
Muchas profesoras y profesores, testigos del creciente clima de tensión, lanzan una serie de peticiones al Gobierno y a la administración pública a nivel estatal, autonómica y local con el fin de prevenir, detectar y eliminar los discursos de odio en las aulas. Diferentes demandas que incluyen desde impulsar nuevas estrategias y planes para evitar cualquier tipo de discriminación a revisar los procedimientos burocráticos ya existentes, pasando también por incluir materias relacionadas con la educación antirracista, entre otras reclamaciones.
Sobre la CME
La CME es una coalición internacional formada por ONG, sindicatos del entorno educativo, centros escolares y movimientos sociales de muy diverso signo que se movilizan para reclamar el cumplimiento íntegro de los compromisos internacionales firmados por los Estados para garantizar el acceso a una educación de calidad para todas las personas del mundo. En España la coalición es liderada por las organizaciones Ayuda en Acción, Educo, Entreculturas y Plan International. La CME nace en el año 1999 con el objetivo de sensibilizar y movilizar a la ciudadanía como portavoces y activistas del Derecho a la Educación e incidir en los representantes políticos para que cumplan sus compromisos con el derecho a la educación
Fotos: David Sañudo