El sindicato aboga históricamente por una inspección de trabajo “potente, bien dotada, tanto humana como materialmente”, para controlar que las normas se cumplen
Tras una comisión gestora por la jubilación del anterior secretario provincial de UGT, que se alargó más de lo esperado por la pandemia, Marcelino Muñoz lleva las riendas del sindicato en Salamanca desde marzo de 2021.
¿Cómo está ahora UGT? ¿Está fuerte, va ganando representatividad?
Nosotros mantenemos más o menos la misma representatividad que veníamos teniendo durante estos años, al igual que la afiliación. Somos uno de los sindicatos más potentes a nivel nacional y obviamente de Salamanca. Entre los dos grandes sumamos aproximadamente un 80%.
Como ha sido siempre...
Así es. Como las elecciones sindicales son un proceso vivo que continuamente se están haciendo en las empresas, va evolucionando, delegado arriba o abajo, pero más o menos la representatividad se mantiene. Al igual que la afiliación. Salamanca es una provincia de una tasa de afiliación quizás no tan alta como en otros puntos del país, pero también porque tenemos mucho empleo precario, que propicia que la gente no se afilie. Hay mucho empleo temporal, mucho empleo parcial, mucho sueldo bajo y al final todo eso hace que la tasa de afiliación no sea tan alta como en zonas por ejemplo industriales.
Se dice que es que los sindicatos no se mueven…
No nos movemos, pero cuando tienen problemas no van a ninguna oficina parroquial a preguntar qué ha pasado con mi contrato, vienen a vernos a nosotros. Por mucho que se diga y el imaginario popular diga, somos los que negociamos los convenios, los que tenemos servicios jurídicos potentes, porque muchos de esos sindicatos, sobre todo sectoriales y más de empresa, cuando un trabajador tiene un problema externalizan el tema jurídico, porque no tienen servicios jurídicos propios.
Entonces, ¿sigue habiendo mucho empleo precario? ¿Cómo está el mercado laboral en Salamanca?
En Salamanca el mercado laboral es eminentemente precario, pero porque dependemos mucho del sector servicios. Del total de afiliados a la Seguridad Social, el 80% son del sector servicios. Es un sector que por definición es precario, porque depende mucho de la estacionalidad, va muy unido a los picos y a los valles, y es precario de por sí. Todos sabemos lo que es el comercio, todos sabemos lo que es depender de la hostelería, de los picos, de las temporadas altas, y al final hace que en el mercado laboral en Salamanca el componente sea salarios más bien bajos y bastante precario.
Los salarios siguen siendo bajos, a pesar de la subida del SMI ¿no?
Los salarios son bajos. Una prueba de que lo sean: en el conjunto nacional cuando tú subes el salario mínimo, tienes que adaptar los salarios de los convenios, si hay alguno por debajo, tienes que subir; eso ha afectado a nivel nacional a alrededor del 30% de los convenios y en Salamanca, según las estimaciones que estamos haciendo, rondará el 40%. Los salarios son bajos y eso nos lleva a otro problema, a precarizar más si cabe el mercado laboral, porque hay muchas empresas que lo que hacen es bajar horas a la gente para seguir pagando lo mismo que antes; muchos sectores, sobre todo los empleos más precarios, que suelen ir unidos sobre todo a los más feminizados. Es así, cuando sube el SMI, te bajo una hora o dos horas o cinco y te sigo pagando lo mismo, y si es posible, te obligo a trabajar esas horas. Esto va unido a lo que nosotros demandamos históricamente, que es una inspección de trabajo potente, bien dotada, tanto humana como materialmente, porque de qué me vale a mí tener el mejor código de circulación del mundo si no tengo ni un solo guardia civil en la carretera para que controle que se cumpla. Eso pasa un poco con el mercado laboral, que si no tenemos una inspección de trabajo potente...; me consta que trabajan mucho y bien, pero no llegan.
Pese a ese escaso personal, ¿han aumentado las inspecciones?
Hay poco personal, no llegan; por nuestro servicio jurídico pueden pasar en un día 20 personas, que son 20 incumplimientos por parte de muchos empresarios. No se puede generalizar, pero hay muchos empresarios que trampean, y al final paga la fiesta el más vulnerable, que suele ser el trabajador. Pero sí creo que han aumentado las inspecciones. A mí me consta que desde la Inspección de Trabajo se trabaja bien, lo que pasa que los medios humanos son escasos, hace falta más gente, sobre todo porque es un método para proteger al más débil en una relación laboral, que es el trabajador.
¿Cómo ve la reducción de la jornada laboral? ¿Es posible en Salamanca?
Nosotros estamos pidiendo más reducción de esas 35 horas: 32,5. Si se legisla en ello, se tendrá que cumplir. Pero pasará lo mismo que con la subida del SMI, dirán que la economía se va a arruinar, que esto va a ser la ruina, el paro va a aumentar… Sin embargo, la Seguridad Social ahora mismo en Salamanca está en récords históricos de afiliación y de recaudación, con lo cual ni la reforma laboral iba a ser una destructora de empleo ni la subida del SMI está destruyendo empleo.
Cambiando de tema, la siniestralidad laboral, cada vez con cifras más altas
Es un problema serio, que yo creo que la Junta de Castilla y León, que es quien tenía que poner toda la carne en el asador, no lo está poniendo. De hecho había parte de esa prevención que la llevábamos nosotros vía programas; esa parte se ha dejado de hacer tanto por UGT como por CCOO y CEOE, que somos las organizaciones tanto sindicales como empresariales más representativas. Teníamos una parte que hacíamos de prevención de riesgos, teníamos técnicos de prevención, porque al final nosotros somos los que estamos en la calle; eso se ha dejado de hacer. Nosotros hacíamos visitas sistemáticas a todas las empresas y dábamos las formaciones clave, porque la prevención es el 90%, muchos accidentes laborales pasan por desconocimiento. Y si no hay un mecanismo de vigilancia, nos pasa lo mismo que con las infracciones, tú a la gente la tienes que informar, formar y estar pendiente de que las cosas se cumplan.
Es obligatorio por las empresas, pero ¿lo hacen?
Me consta que por la mayor parte de los empresarios se hacen las cosas bien, pero muchas veces si el trabajador no está formado y no tiene ciertas habilidades en ese campo o no tiene un conocimiento bueno de los riesgos, al final la siniestralidad laboral va a seguir aumentando. Además va unida directamente a la precariedad en el empleo; empleo precario, más accidentes de trabajo. Siempre es así, porque a una persona que está cuatro o cinco meses, no se le ha formado correctamente; al final es un círculo vicioso.
Otro problema, la brecha salarial, ¿cómo está en Salamanca?
A nivel nacional ha bajado bastante en el momento que el SMI ha subido, porque sube para los puestos más precarios que al final son los más feminizados. Nos preocupa enormemente que la brecha salarial se perpetúe en el tiempo y pase a serlo a la hora de la jubilación. Seguimos siendo una sociedad en la que la mujer es cuidadora y entra y sale del mercado laboral, cosa que el hombre no hace o hace mucho menos, porque el porcentaje de excedencias por cuidados de familiares es muy poco de hombres frente a mujeres; solamente esa excedencia la coge el hombre cuando la mujer gana mucho más que él, que suele ser en contadas ocasiones. La configuración del mercado laboral es así, y claro es una brecha que se perpetúa llegando a la jubilación. Ahora hay una modificación, las jornadas parciales tendrán un plus de jubilación, pero hasta ahora, si has tenido empleos precarios, has cotizado poco durante toda vida por empleos parciales o temporales, al final llega la hora de la jubilación y tienes bastante menos que un varón de tus mismas condiciones, pero que no ha partido la jornada laboral ni ha salido ni entrado del mercado del trabajo.
Quiero explicar que la brecha salarial va por el conjunto de la población trabajadora. Hablamos de lo que gana el conjunto de trabajadoras y el conjunto de trabajadores, se divide y sale lo que gana menos una mujer que un hombre, tan simple como eso. Lo que pasa que se hace mucha demagogia. Muchos dicen “en mi empresa cobramos lo mismo”; obviamente se paga lo mismo, pero, por ejemplo, si tiene que cuidar a la familia, va a ser siempre una mujer. La empresa va a pagar lo mismo, pero la mujer tiene otro tipo de relación con el mercado laboral, sale muy fácilmente pero entra de manera dificultosa, igual que en tiempos de crisis. Solo hay que ver que en Salamanca el porcentaje de mujeres en situación de desempleo es el 60%.