Solo se tarda 2 horas y 39 minutos en tren desde Madrid, en llegar a una de las ciudades universitarias europeas más bonitas. De hecho, los 175 km que separan ambos destinos merece la pena recorrerlos solo por ver el centro histórico de este lugar
Capital de la noche, de la moda y de la gastronomía, Madrid es una ciudad alegre y abierta conocida por sus museos, sus restaurantes y su vida nocturna. Sorprende con rincones históricos repletos de encanto, con tabernas castizas centenarias y con barrios de diferentes estilos. Sin duda, un destino díficil de igualar y uno de los más interesantes de Europa. Si a todo esto le sumamos la perfecta infraestructura ferroviaria que ofrece para comunicarse con el resto de las ciudades españolas, encontramos el lugar ideal tanto para vivir como para pasar unos días de vacaciones.
Quienes viven en Madrid o simplemente quienes están de paso allí, cuando deseen trasladarse a otras ciudades del país, no van a tener ningún problema. La gran cantidad de trenes que a diario salen de la capital española permiten llegar desde Madrid a Valencia, por ejemplo, en muy poco tiempo y con total comodidad. Pero no es este el único destino al que se puede hacer una escapada incluso de un solo fin de semana. La rapidez del ferrocarril consigue que viajar hasta Sevilla, Salamanca, Barcelona o cualquier otro destino dentro de la península no implique una pérdida extrema de tiempo.
La ciudad que este año ha acogido los famosos Premios Grammy latinos, está conectada directamente con Madrid gracias a su estación de Santa Justa en un recorrido que apenas dura 2 horas 30 minutos. Sin duda, la forma más relajada y práctica de llegar hasta la capital hispalense. Una vez allí, hay lugares que son imprescindibles de ver. Entre ellos se encuentran:
Parque de María Luisa. En frente de la conocida Plaza de España se encuentra un espacio verde con más de treinta hectáreas donde relajarse y refrescarse en verano, gracias a la enorme cantidad de cascadas, fuentes y árboles que hay en su interior.
Solo se tarda 2 horas y 39 minutos en tren desde Madrid, en llegar a una de las ciudades universitarias europeas más bonitas. De hecho, los 175 km que separan ambos destinos merece la pena recorrerlos solo por ver el centro histórico de este lugar en el que destacan:
La Universidad. La fachada exterior de este edificio histórico llama la atención de todos los viajeros. No en vano, está repleta de elementos decorativos de piedra, siendo el más conocido el de la rana sobre una calavera. Dice una leyenda urbana que hay que encontrarla si se desea aprobar los exámenes. Miguel de Unamuno ha impartido clase en esta universidad y Hernán Cortés ha sido estudiante en ella, entre otros ilustres y famosos personajes.
La Ciudad Condal es la cuna del modernismo, capital mediterránea y Patrimonio de la Humanidad. El recorrido en tren desde Madrid a Barcelona se realiza en tan solo 2 horas y 45 minutos y una vez en esta ciudad, que mira al mar y a la montaña, son innumerables los barrios, los edificios y los rincones que hay que conocer y recorrer, pero sin duda algunos de los imperdibles son:
Montjuic. Esta montaña se asoma al inmenso Mediterráneo como si fuera una ventana que está mirando al mar. Aquí se pueden contemplar atractivos como su popular fuente mágica, el castillo o el Palau Sant Jordi.
En definitiva, pasar un fin de semana distinto y disfrutar de momentos inolvidables y únicos es posible gracias al ferrocarril. Elige tu destino y aprovecha la seguridad, la rapidez, la comodidad y los precios que implica viajar en tren desde Madrid hasta tu destino preferido.