Javier Castaño sale de vacío tras un lote intoreable de Miura, ganadería de la que solo se lidiaron al completo tres de los cuatro toros del encierro, y buen juego de los toros de El Canario
Decepción en Vitigudino con la corrida de Miura, pues solo uno de los tres que se liaron se dejó dar algún muletazo, pues el cuarto fue devuelto a los corrales tras acusar una lesión en los cuartos traseros. Lo mejor de la tarde, dos toros de El Canario, uno para el rejoneador Sergio Galán, que desorejó, y el sobrero que cerraba plaza y al que Damián Castaño le cortó una oreja, aunque pudieron ser dos, o algo más, si acierta con la espada.
Abría plaza Sergio Galán, aunque antes hubo un minuto de silencio en recuerdo de Antolín Alonso, presidente de esta plaza muchos años y que falleció en diciembre pasado. El rejoneador madrileño comenzó sin fortuna tras cometer dos errores con sendos rejones de castigo, mal colocados y sin romper el palo, lo que al final le castigó en el premio. De nada le sirvió estar bien en banderillas, seis largas y tres cortas, además de dos claveles, aunque justo en el toreo a caballo, e incluso de matar bien, ni siquiera la insistencia del público fue suficiente para que le presidente le concediera una oreja, que sí mereció.
En su segundo, Sergio Galán estuvo más decidido, lo hizo todo bien, le puso más ganas y estuvo mejor en el toreo a caballo, pero sin demasiados alardes. Ahora sí, el presidente, José Cordobés, le concedió dos merecidas orejas y la vuelta al ruedo para el toro de El Canario.
Los hermanos Castaño tenían ante sí cuatro miuras, tres de ellos sí se lidiaron hasta el final y solo uno se dejó dar algún muletazo. Comenzaba Javier Castaño la faena de muleta con varios trincherazos sobre un toro que enseguida comenzó a buscar a la salida del pase. Lo intentó por ambos pitones pero el de Miura comenzó a tirar gañafones al cuello del torero. Javier no acertó con la espada, aunque tuvo la ovación del público por intentarlo. Salió a saludar. Se escucharon algunos pitos en el arrastre.
Y su segundo, tercero del toreo de a pie, quinto de la tarde, apenas si se tragó un muletazo, un comportamiento que se vio durante la lidia, manso y sin fijeza, como si lo trajera todo aprendido. Mató al segundo intento con una media. Salió a saludar. Pitos para el toro en el arrastre.
Damián Castaño estuvo más decidido, aunque también tuvo toros que se dejaron, sobre todo el que cerraba plaza, sobrero y de la ganadería de El Canario. El pequeño de los Castaño le puso todas las ganas a su primero de Miura, lo recibió de rodillas con el capote, lo que ya decía de sus intenciones. Tras el tercio de banderillas salió a saludar Luis Miguel Amado por los dos pares que le colocó al sevillano. Damián le arrancó varias tandas al de Miura, pero jugándosela a medida que avanzaba la lidia, una faena de arrojo y valentía pero que estropearon los aceros. Ovación del público y salió a saludar.
El sexto de la tarde, también de Miura, tras salir del caballo acusó una lesión en los cuartos traseros, por lo que fue devuelto a los corrales. Salía el sobrero, un toro negro de El Canario y que podía haber sido de vuelta al ruedo, noble y repetidor hasta el final. Damián lo toreó por ambos pitones con varias series dignas de mención, toreó con gusto y realizó una gran faena que se vio ensombrecida por un pinchazo en el primer intento, aunque le bastó la media del segundo, si bien tuvo que recurrir a la cruceta, con la que acertó a la primera. El presidente, de nuevo, se hizo de rogar más de la cuenta, aunque finalmente le concedió una oreja de peso para Damián. Aplausos para el toro en el arrastre.
Empresa: Emilivia Espectáculos de Thierry Cazaubon, con media plaza y tarde calurosa.
FICHA DEL FESTEJO
Corrida de toros mixta
Plaza de toros de Vitigudino: media entrada, unas 2.000 personas.
Sergio Galán: ovación y dos orejas.
Javier Castaño: ovación y ovación.
Damián Castaño: ovación y una oreja.
Dos toros de El Canario para rejones: el primero cumplió para el caballo y el segundo dio la vuelta al ruedo.
Cuatro de Miura para toreo de a pie: primero y tercero prácticamente imposibles, el segundo manejables, y el cuarto fue devuelto a los corrales lesionado.
Sobrero de El Canario para el toreo de pie: toro noble y repetidor que fue aplaudido en el arrastre.