Según la Policía Nacional, se desplazan a las ciudades en las asaltan los pisos, abandonándolas después de ello
La Policía Nacional de Salamanca ha detenido a dos varones de nacionalidad georgiana dedicados a marcar puertas de viviendas para robar en las que están vacías. Una práctica que ya se había detectado en el verano anterior en la ciudad charra.
La identificación se llevó a cabo después de recibir una llamada en la que se informaba, que habían observado a dos varones ajenos a un inmueble en el barrio Las Delicias, en la capital charra, que estaban inspeccionando el acceso y haciendo marcas en las viviendas.
Los agentes en servicio se personaron en lugar y los sujetos trataron de huir pero finalmente fueron interceptados en calles próximas tras la persecución, ofreciendo una gran resistencia y forcejeando con los agentes. Una vez reducidos proceden a su identificación y entre los efectos que llevan le intervienen juegos de ganzúas, una varilla metálica a modo de ganzúa y una tarjeta bancaria a nombre de otra persona, por lo que proceden a su detención e intervención de los efectos.
En cuanto al modus operandi empleado, consiste en el marcado previo de las puertas de los domicilios seleccionados. De este modo, colocan entre el marco y la puerta un hilo de pegamento, testigos de plástico o trozos de papel fino (tipo servilleta de bar), los cuales indicarían si se ha abierto la puerta y así asegurarse de que las viviendas están vacías en el momento del robo.
Transcurridos unos días regresan a los domicilios señalados y tras comprobar que el testigo sigue en el lugar, proceden a la apertura de la puerta utilizando diferentes tácticas, basadas en la manipulación de las cerraduras para acceder al interior de la vivienda registrarla y sustraer efectos. En todos los casos, los autores se desplazan a las ciudades en las que van a cometer los hechos durante unos días.
La Policía Nacional recuerda que en el caso de localizar este tipo de marcas sospechosas – trozos de papel, hilos de pegamento, marcas transparentes u otras – en las puertas de entrada a los domicilios, o bien personas sospechosas en el interior de las zonas comunes de los accesos a las viviendas, avisen de inmediato la Policía a través del número de teléfono 091, el cual está disponible durante las 24 horas.
Además, se reiteran una serie de pautas básicas para intentar evitar este tipo de hechos en los domicilios, entre ellas:
Las investigaciones policiales llevadas a cabo sobre este tipo de hechos y los grupos que los realizan han evidenciado que los autores se desplazan a las ciudades en las que cometerán los hechos durante espacios cortos de tiempo, abandonándolas después de cometerlos.
Se trata de grupos especializados y perfectamente organizados, en los que cada uno de ellos tiene su función establecida previamente. Unos realizan labores de vigilancia en los domicilios previas al marcado de las puertas con los testigos. Y una vez comprobado posteriormente que no hay nadie en el interior, acceden al interior de la vivienda y cometen el hecho con total tranquilidad, entregando una vez finalizado el registro todos los efectos a otro miembro de la organización que será el encargado de recepcionarlos, con el fin de darle salida rápidamente y no ser recuperados en el caso de que los ejecutores materiales puedan ser localizados y detenidos por fuerzas policiales.
Alguno de los integrantes del grupo realiza labores de vigilancia en el exterior mientras otros cometen el hecho, con el fin de avisar en caso de que algo vaya mal, y así asegurar la huida.
Nunca facilitan su lugar de residencia y suelen permanecer en nuestro país periodos de dos o tres meses desde su entrada, regresando a su país para al poco tiempo volver con el mismo fin. Además, en el caso de ser expulsados a su país, una vez allí se cambian la identidad y regresan a España con esa nueva documentación.