Viernes, 03 de mayo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Mentiras, manipulación y maldad
X
Desde la Code. Profesor de Derecho Penal de la Usal

Mentiras, manipulación y maldad

Actualizado 01/07/2023 09:14
Julio Fernández

Hace unos días, y en una entrevista concedida por el presidente del gobierno a un medio de comunicación, Pedro Sánchez decía que el PP y el resto de la oposición ultra-conservadora están intoxicando en los medios de comunicación de España con mentiras, manipulación y maldad. Y no le faltaba razón al calificar la conducta de los líderes de la oposición reaccionaria con estos infames epítetos. En este modesto breviario trataré de justificar los gruesos calificativos que merecen Feijóo, Abascal, González Pons o Ayuso y los incondicionales seguidores de unos y de otros.

Y, como punto de partida, la historia se repite. La derecha y la ultraderecha quieren actualmente acabar de un plumazo con los disidentes. Me viene a la memoria el dolor, la pesadumbre, el desasosiego y la tristeza que sintieron intelectuales como Unamuno, Machado, Lorca, Miguel Hernández, Luis Cerduda, León Felipe y otros muchos, con el “dolor de España”, un peso excesivo que llevaron en su mochila hasta su muerte, algunos aquí y otros en el exilio, asesinados –Lorca- por el ejército fascista, al que hoy admiran políticos como Abascal o Ayuso; o muertos de pena –Machado-, quién sólo poseía un papel arrugado con un verso encontrado en su chaqueta raída y mugrienta “Estos días azules y este sol de la infancia”; o de rabia por no poder volver a España –León Felipe-, para quién, en su “Ganarás la luz”, decía que “en el mapa de mi sangre España limita todavía. Por el oriente con la pasión,/al norte con el orgullo,/al oeste, con el lago de los estoicos/ y al sur, con unas ganas inmensas de dormir”. La rabia de León Felipe también se manifestaba al describir a los filósofos, “yo no soy el filósofo. El filósofo dice: Pienso…luego existo/ Yo digo: lloro, grito, aúllo, blasfemo…luego existo”.

Porque la historia se repite y esta derecha cainita, a quién no le “duele España”, sino sus intereses personales, quiere acabar con las políticas sociales y progresistas. Ya lo dicen “acabar con el Sanchismo”, pero cuando desarrollan sus proyectos para ello se les ven sus oscuras intenciones. Son una carabela de Colón en el siglo XXI, arcaica y carcomida pintada con titanlux, creyéndose modernos, cuando son la quintaesencia de la vieja y podrida España, la que se considera heredera del poder, la casposa y patriótica –patriotismo de hojalata, eso sí-, la de las banderas en la solapa y en las muñecas, porque luego cuando hay que contribuir con impuestos para el sostenimiento de políticas públicas como la sanidad, la educación, los servicios sociales, la dependencia o la lucha contra la violencia de género, esconden la cabeza debajo del ala y se llevan sus ahorros a paraísos fiscales. Quieren aparentar que desean gestionar los intereses colectivos, los de todos, y, en realidad, sólo les preocupan sus intereses gregarios y elitistas.

Feijóo es un mentiroso compulsivo que practica, como nadie, la hipocresía y la esquizofrenia política. Resulta vergonzoso que en Bruselas este jueves y ante la Comisión Europea diga que con quién más ha pactado ha sido con el PSOE, porque han dado su apoyo a los alcaldes de Barcelona o Vitoria (PSOE), pero ha ocultado que ha pactado con más de 100 ayuntamientos en España después de las elecciones municipales y con 5 Comunidades Autónomas (Castilla y León, Baleares, Valencia, Aragón y sabemos que también con Extremadura, aunque no han ganado las elecciones en esta región). Y eso que miente en algo que conocemos todos. ¿Qué hará con las cosas que desconocemos?

No se puede ser más hipócrita, cuando el PP lleva más de un año –también Feijóo- posicionándose radicalmente en contra de la Reforma Laboral y en los últimos días –cuando se ve con la soga al cuello, porque la reforma ha sido muy positiva para el empleo- dice que es “sustancialmente buena” y que no la va a reformar. No se puede ser más vil, cuando ante la evolución favorable de la economía española -que es la que más crece de las economías de la Eurozona- dice que eso no es cierto y que somos económicamente débiles. No se puede ser más ruin, cuando ante la evolución muy positiva de la inflación –que en junio ha bajado del 2 %, concretamente al 1,9%- diga que tenemos una alta inflación y que vamos en el furgón de cola de Europa. No se puede ser más perverso, cuando ante la favorable evolución del empleo –tenemos más personas cotizando a la Seguridad Social que nunca en nuestra historia- diga que el gobierno está manipulando los datos del paro. No se puede ser más trilero cuando aprovecha sus viajes a Bruselas para decir que el gobierno es opaco y partidista al distribuir los fondos europeos, exigir transparencia al Ejecutivo, demandar más democracia en la gestión de los intereses y, luego, ocultar los sobresueldos que recibe de su partido y que sabemos que son mucho más elevados de los que han dicho –y han informado falsamente después de requerírselo por activa y por pasiva el presidente del Senado-. No se puede ser más cobarde, cuando ante la propuesta de Sánchez de tener debates públicos en cualquier medio de comunicación, ponga excusas de mal pagador y no las acepte. No se puede ser más mentiroso, cuando no acepta debates en el Ente Público RTVE, alegando que “no es imparcial” –cree el ladrón que todos son de su condición-.Feijóo pone excusas porque en el fondo sabe que las políticas de este gobierno han sido muy favorables para los españoles –aunque no lo reconozca públicamente- y sabe que si metafóricamente sale al ring a combatir limpiamente con Sánchez, caerá a la lona por KO técnico en el primer asalto. Feijóo no quiere debates porque quiere ganar la partida en los despachos intoxicando a la opinión pública apoyándose en sus aduladores mediáticos.

¿Los españoles pueden darle la confianza en las urnas a un político que está absolutamente desnortado y que es mentiroso, un manipulador y un incoherente? Si esta respuesta es afirmativa es que algo falla en nuestra sociedad. Aunque, después de lo de Ayuso, todo es posible. El otro día un buen amigo madrileño me decía: “Es cierto que algo ha conseguido Ayuso: ha conseguido que los madrileños seamos cada vez más odiados fuera de los confines de nuestra región”.

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.