Los Bomberos lamentan la “persecución” de la Plataforma y se ofrecen a intervenir de forma altruista

La Asociación Humanitaria de Bomberos Voluntarios de Ciudad Rodrigo compareció en la mañana del martes ante los medios de comunicación -tal y como tenía previsto- para dar a conocer su punto de vista en torno a la situación generada, que les ha llevado a tener que abandonar el Parque de la calle Voladero, que como recordó en ese acto el presidente de la Asociación, Jesús Muñoz, “es una realidad gracias a los esfuerzos que realizamos para dotar a nuestra ciudad de un equipamiento digno de su importancia”.

Como punto más relevante, la Asociación recalcó que ahora mismo “la alarma social es real”, porque en caso de que se produzca cualquier tipo de emergencia, el tiempo de respuesta va a ser mucho más grande. El comandante de los Bomberos, Joaquín Pellicer, puso como ejemplo que hasta el día de ayer un fuego en la campana de una cocina podían tenerlo “finiquitado en cinco minutos”, mientras que a partir de ahora puede haber que esperar hasta una hora a que se preste una respuesta adecuada (al tener que acudir más bomberos desde Villares de la Reina).

Como publicamos en la noche del lunes, a partir de las 22.00 horas quedó sólo 1 bombero de servicio en el Parque mirobrigense, que al menos era de Ciudad Rodrigo, mientras que en la mañana del martes se tenía constancia de que había 2, con el problema de que ninguno es de la ciudad, con lo cual no se conocen ‘ni las calles’. A esta falta de medios humanos (habitualmente había 4 bomberos por turno), se une la de medios materiales.

En el Parque han quedado concretamente un vehículo de intervención rápida, otro de intervención forestal, una nodriza y otro de grandes emergencias (para cuando hay mercancías peligrosas), explicando Joaquín Pellicer que por ejemplo se carece de vehículos ligeros, siendo la situación “deficitaria”, después de que la Asociación haya sacado los vehículos de su propiedad, evidentemente para protegerlos, depositándolos en una nave que les han cedido dos particulares, Sonia y José Luis (a quiénes muestran su agradecimiento).

En todo caso, la Asociación, en un ejercicio de responsabilidad, ha decidido dejar en esos 4 vehículos que son de la Diputación de Salamanca y que permanecen en el Parque el material que les pertenece (que es la mayoría), ya que en caso contrario, si esos vehículos se movilizan para cualquier emergencia, “no estarían dotados; carecerían de medios para atender a la ciudadanía”, en palabras de Joaquín Pellicer.

Además de para protegerlos, entre las razones para sacar los vehículos de su propiedad está que puedan disponer de ellos “si se nos requiere para algo”, porque lo que se recalcó en la mañana del martes es que la Asociación sigue ofreciendo sus servicios, de forma totalmente altruista, “como voluntarios, a Ciudad Rodrigo, comarca y a quién reclame nuestra ayuda: lo haremos como lo hemos hecho, con profesionalidad y dedicación, si bien adaptándonos a la nueva situación de no tener acceso directo a la red de movilización de medios”.

De forma concreta, desde la Junta Directiva se han ofrecido a las diferentes administraciones “para colaborar e intervenir de manera altruista” (“no podemos ni queremos ni debemos cobrar”). Según expresó Jesús Muñoz, el abrumador apoyo de los mirobrigenses en la noche del lunes “nos da mucha más fuerza para seguir con nuestra labor de servicio a los ciudadanos”, añadiendo asimismo que “nos hace más grandes la inquina demostrada por la Plataforma de Bomberos Profesionales contra esta Asociación”.

Contundencia contra la Plataforma

Precisamente, uno de los ejes de la comparecencia de la mañana del martes fue denunciar la “persecución” de la Plataforma de Bomberos Profesionales de Castilla y León contra una Asociación que “no ha recibido ningún tipo de reclamación o queja” en 123 años (“todo lo contrario, numerosos agradecimientos, reconocimientos y felicitaciones”). Para la Asociación, la Plataforma, además de “pasarse por encima la seguridad de los ciudadanos”, “hasta ahora solo han sido capaces de demostrar ser profesionales a la hora de generar alarma social con desinformación y mentiras” apuntando que “la susodicha Plataforma sólo es reconocida por su afán de pleitear con las administraciones y denostar a quienes la dejan en evidencia”.

La Asociación mirobrigense cree que esta “inquina” hacia ellos tiene su razón en que “son los voluntarios los que les hacen daño”, ya que todos esos bomberos funcionarios cobran por cualquier turno o servicio extra (y además un pastizal). Al respecto, se recordó que, aunque la Asociación se ha ido adecuando a los tiempos contratando a los voluntarios para que haya servicio las 24 horas del día, se ha mantenido “la labor como voluntarios de sus integrantes, llevándola a cabo fuera de sus horas de trabajo sin recibir compensación alguna” tanto en catástrofes (se mencionó el despliegue en el incendio de Monsagro) como en citas sociales.

Así, se considera que la Plataforma tiene o un “total desconocimiento” de la Asociación o un deseo de “generar en la población la sensación de desprotección”, al argumentar que “carece de las condiciones personales y formativas necesarias para el correcto desarrollo de tales funciones”, cuando, como remarcó Jesús Muñoz, los Bomberos mirobrigenses reciben “formación continua”, además de señalar que “la profesionalidad no se consigue con aprobar una oposición por mucho que lo diga una ley, sino con trabajo, formación y dedicación vital al servicio de los ciudadanos”.

Al respecto, lamentan que el Juzgado que ha dictado la medida cautelar no se haya molestado en “comprobar” si la afirmación que recoge la Plataforma en su demanda es cierta. Además de no compartirla, la Asociación de Bomberos indica en torno a esa medida cautelar que no la entiende, especialmente cuando dice que en sus fundamentos que “la medida cautelar podrá denegarse cuando de esta pudiera seguirse perturbación grave de los intereses generales o de terceros”.

En este sentido, la Asociación señala que “parece ser que el interés general de la seguridad de los ciudadanos de la comarca y de los miles de ciudadanos que circulan por sus carreteras, es menor que el interés corporativo de una determinada entidad privada a la que la seguridad de los ciudadanos ‘se la trae al pairo’” (de hecho se preguntaron si cuando haya un accidente con personas atrapadas “van a venir los señores de la Plataforma a sacarlas”). Así, la medida cautelar sí que “conlleva una verdadera alarma social ante la desprotección que supone a la ciudadanía”.

Como ya se ha publicado, la Diputación de Salamanca (que es la entidad directamente demandada por la Plataforma) está recurriendo la decisión judicial ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, añadiendo por su parte que “vamos a seguir luchando”, y que seguirán funcionando “mientras la Diputación siga apostando por estos modelos” de complementariedad de funcionarios y voluntarios, que Joaquín Pellicer recordó que existen en otros países como Alemania, Francia o Portugal.

Como clave, ven necesario que “todos los estamentos de la ciudad y la comarca eleven a la Junta la necesidad de modificar” la Ley de Protección Ciudadana 4/2007, que “debe recoger la realidad de Castilla y León, con funcionarios, voluntarios, colaboradores, etc.”, apuntando Joaquín Pellicer que la figura de los voluntarios “siempre ha existido y existirá”.

Mientras se resuelve la situación actual, que nadie sabe cuánto puede durar (lo que tarde la justicia en decidir), Jesús Muñoz explicó en la mañana del martes que la Asociación se va a volcar en “reincorporar al mercado laboral a nuestros bomberos contratados, con el fin de que permanezcan el menor tiempo posible en la situación de desempleados y puedan seguir con su proyecto vital, suspendido temporalmente gracias a la ‘profesionalidad’ de la Plataforma de Bomberos Profesionales de Castilla y León”.