Consejos para afeitarte teniendo la piel sensible

Tener la piel sensible deriva en varios aspectos negativos, afectando algunos de ellos a la calidad de vida de quien sufre esta condición. Así lo demuestran las rojeces que aparecen por el simple hecho de que cambie el tiempo, como precisamente está pasando ahora en Salamanca tras unos días de intensa lluvia que darán paso a jornadas de bastante calor. A la lista hay que sumar las dificultades para afeitarse.

Si también es tu caso, no te preocupes. Con los consejos que daremos a continuación obtendrás un muy buen resultado. El nivel de apurado será óptimo y tu piel no se resentirá en forma de heridas, sequedad, escozor u otras molestias.

Haz uso de una máquina que se haya fabricado teniendo en cuenta de manera específica las necesidades de la piel sensible

En el mercado hay ingentes cantidades de productos para el afeitado masculino, pero el mejor consejo que podemos darte es el de utilizar en concreto uno de ellos: la maquinilla de afeitar electrica para pieles sensibles. Las hay de varios tipos, tanto rotativas como de láminas. Estas últimas son las que recomendamos fervientemente, ya que respetan mucho la piel sensible sin que su estado empeore lo más mínimo.

Si por motivos económicos o de otros tipos prefieres decantarte por una máquina rotativa, también puede ser una buena idea siempre y cuando te asegures previamente de que se ha fabricado de forma específica en base a los requerimientos de una dermis con un alto nivel de sensibilidad.

Este tipo de máquinas hacen gala de una serie de características muy a tener en cuenta. Una de las más valoradas por los salmantinos que tienen la piel sensible es la implementación de tecnología bastante avanzada gracias a la cual los tirones pasan a ser historia o, como mínimo, se reducen de manera drástica.

Por otra parte, las Maquinillas que han sido fabricadas para las pieles sensibles destacan por la suavidad de sus cuchillas. Es por ello que la dermis está mucho menos irritada si la comparamos con el resultado que obtienen las personas que utilizan otras máquinas.

La importancia de la preparación de la zona a tratar

Aunque aciertes de lleno eligiendo una buena maquinilla que respete la piel sensible con la suavidad de sus cuchillas y una tecnología vanguardista que no dé tirones, no obtendrás un resultado cien por cien satisfactorio si antes de dar comienzo al afeitado no llevas a cabo la oportuna preparación.

Lo primero que tienes que hacer es limpiar la zona que va a ser tratada: las patillas, el bigote, la parte del cuello, etcétera. Es esencial que la limpieza sea buena y no solo superficial. Asegúrate de acabar con la grasa que inevitablemente se acumula, así como con cualquier impureza. Por supuesto, para ello no hagas uso de productos con fórmulas que contienen ingredientes químicos que no respetan la piel sensible.

Proceder a la apertura de los poros es fundamental. Y es que gracias a ello, el vello que tengas en la zona a tratar dejará de estar tan duro. Por ende, podrás afeitarte de manera más suave y sencilla, lo cual agradecerá enormemente tu piel sensible. Para conseguir este resultado tan bueno puedes recurrir al agua caliente u optar por el propio vapor.

Acto seguido es buena idea, sobre todo si tienes una piel muy sensible, aplicarte un poco de bálsamo hidratante. Sea cual sea la crema elegida, asegúrate de ponerte una capa muy fina, ya que el objetivo simplemente es el de agilizar el deslizamiento de la maquinilla, facilitándolo al máximo para que no le cueste pasar por el área a afeitar.

Revisa el estado de la cuchilla

Cuando la máquina de afeitar para pieles sensibles está nueva, la cuchilla se encuentra en un estado inmejorable. Sin embargo, es inevitable que el paso del tiempo y el uso periódico le pase factura. Es por este motivo que debes revisar su estado antes de dar comienzo al afeitado.

Aféitate de esta manera

Hasta ahora hemos hablado del proceso previo, pero ahora llega el momento de profundizar en el afeitado en sí. Es importante que respetes aquella dirección en la que crece el vello facial, ya que en caso contrario tu piel sensible sufrirá las consecuencias.

Por otra parte, no ejerzas una presión excesiva con la maquinilla. Si has comprado un buen producto, bastará con presionar un poco para obtener un óptimo resultado, evitando así además que tengas que dar varias pasadas, factor que se traduce en que la dermis sensible se resienta.

Aplicando los consejos que hemos descrito, el estado de tu piel no empeorará por afeitarte. Las rojeces, heridas, sequedad y demás contratiempos que antes surgían cuando decías adiós al vello facial pasarán a ser historia, sobre todo si pones fin al proceso cerrando los poros de la zona tratada por medio de agua fría.