“Se está empezando a pagar la carne al precio que el ganadero necesita cobrar”

Octavio Gonzalo es gerente de Dehesa Grande Soc. Coop., un referente en el sector de vacuno de carne en España, además de presidente del sector del Vacuno de Carne en Cooperativas Agroalimentarias de España.

Para quienes aún no lo sepan, ¿quién es o qué es Dehesa Grande?

Pues Dehesa Grande es un grupo cooperativo formado por cinco cooperativas donde dentro del grupo la cooperativa aparte de ser comercializadora tiene su matadero y su sala de despiece en Vitigudino. Está formada por varios cientos de ganaderos y damos empleo a 70 personas de forma directa y a más de un centenar de forma indirecta, es decir un motor económico en la comarca de Vitigudino, comarca ganadera que vive prácticamente en torno a la ganadería del vacuno de carne.

¿Cuándo se fundó Dehesa Grande?

En 1999, por lo que este 2023 cumplimos 24 años y el año que viene serán 25. Estamos en un momento bonito en cuanto a volumen, crecimiento y apoyo social. Hemos cerrado un año en el que la comercializadora de vacuno ha facturado 51 millones de euros y la idea es seguir mejorando nuestras instalaciones, mejorar nuestros servicios e intentar llegar a acuerdos comerciales para ser competitivos por el bien de nuestros socios, lo ganaderos.

Precisamente están en plena ampliación de su granja de cebo…

Efectivamente. Hemos empezado ya las obras para una nueva granja de engorde de terneros que esperamos que al final del verano la podamos poner en marcha. Aparte de cubrir nuestros huecos de producción el objetivo es dar servicio a los ganaderos de la cooperativa que tienen problemas para engordar los terneros en su explotación. Muchas veces, por circunstancias excepcionales como temas sanitarios, los ganaderos ven devaluados sus terneros y la cooperativa ha decidido apostar e invertir 600.000 euros en este proyecto. La idea es cebar otros 600 terneros y que se sumen a los 1.000 que ya cebamos cada año.

Imagino que en estos 24 años no todo ha sido un camino de rosas.

Yo llevo ya aquí 16 años y los primeros años fueron muy duros. No ha habido más remedio que profesionalizar, poco a poco, la gestión y la empresa, gestionar muy bien los cobros, que ha sido un problema histórico. En estos momentos estamos en torno a una comercialización de más de 40.000 animales anuales, lo que significa 800 animales por semana en vacuno de carne, que es nuestro fuerte, aunque tenemos también la cadena de porcino abierta y la de ovino. Centrándonos por lo que se nos conoce fuera de nuestras fronteras, el vacuno es el 90% de nuestro movimiento. Estos datos hacen que seamos ya una empresa referente tanto a nivel regional como nacional, se nos tiene en cuenta a lo hará incluso de elaborar los precios cada miércoles en la lonja nacional, es decir Dehesa Grande tiene un nombre y, además, a través de mi persona, representamos al sector cooperativo tanto en Castilla y León como a nivel nacional.

¿Cuáles son los principales mercados de Dehesa Grande?

Hasta ahora ha sido el mercado nacional, pero poco a poco va cambiando esa tendencia. En 2022 superamos los 50 millones de facturación y el 50% corresponde a venta exterior, lo cual nos hace pensar que el futuro crecimiento tiene que ir ligado a eso. Ahora mismo las oportunidades dentro de nuestro sector se presentan más fuera que dentro y, de hecho, los últimos datos lo están mostrando, estamos vendiendo en todo el sur de Europa, son mercados que van creciendo y van comiéndole terreno al mercado nacional.

¿Cómo está el mercado nacional?

Ahora mismo sufre una bajada de consumo de carne por habitante y año, por lo que intentamos diferenciarnos para estar en las mejores empresas de distribución de carne en España. Se está trabajando desde la Interprofesional y desde las empresas. Nosotros estamos recibiendo visitas de colegios formativas, hacemos jornadas de puertas abiertas…, estamos intentando fomentar y publicitar lo bien que producen los ganaderos de carne de vacuno, cómo se trata a los animales, su alimentación, el nivel sanitario, un esfuerzo que esperemos tenga resultados. Nuestro objetivo es continuar con esa tendencia al alza en producción, que es lo que nos da la herramienta principal para poder acceder a los mercados más interesantes, donde no siempre es el de más precio sino el que te va a asegurar el cobro. Eso muchas veces hace inclinarte por las grandes superficies, empresas multinacionales que tienen sus exigencias como tener un suministro de carne garantizado 52 semanas al año.

¿La carne que comemos actualmente es lo suficientemente segura?

Ahora mismo tenemos la carne más segura que se haya consumido, por supuesto que sí. Podemos estar muy orgullosos de que tanto a nivel sanitario como a nivel de calidad la carne que se produce en España es de un alto valor, tanto por los controles que se hacen en la alimentación y los controles sanitarios, como por la edad de los animales, la genética, el manejo que hacen nuestros ganaderos del producto… Es decir, vendemos un producto de un alto valor añadido y eso poco a poco se tiene que ir transmitiendo. Llevamos dos años de subida de la inflación y a mucha gente le está afectando. Por desgracia hay gente que no va a poder consumir nuestro producto a diario, pero es que realmente nuestro producto tiene que valer eso y más. Por primera vez se está empezando a pagar la carne al precio que el ganadero necesita cobrar. Si hay que ayudar a la gente para consumir carne de vacuno, que lo haga el Gobierno pero no los productores.