Detectan "graves incumplimientos" en el etiquetado de estos productos en los lineales de la gran distribución en el inicio de la campaña de verano
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha detectado "graves incumplimientos" en el etiquetado de frutas en los lineales de la gran distribución en el inicio de la campaña de fruta de verano, según informa en un comunicado.
En concreto, la organización agraria denuncia que se vulnera la norma de etiquetado vigente, ya que no se refleja el origen correcto del producto a la venta, afectando a su trazabilidad y posibilitando el engaño a quien consume, que no tiene elementos fiables para tomar sus decisiones de compra.
De esta forma, COAG ha comprobado cómo se ponen a la venta melones y sandías importados en los que no se precisa el origen o bien que al ofrecerse en mitades o cuartos "cambian sorprendentemente" de origen.
La organización agraria ha exigido a la distribución comercial que cumpla con la normativa actual de etiquetado en la venta de frutas y hortalizas al consumidor y no juegue con el origen de los productos.
"Esta situación afecta a la libertad de elección de las personas consumidoras, pero también afecta a nuestras producciones. La distribución continúa importando productos de terceros países, afectando a nuestra salida a los mercados, especialmente si ni siquiera se advierte el origen real de esas frutas, vulnerando la ley", ha destacado el responsable estatal de frutas y hortalizas de COAG, Andrés Góngora.
Por otro lado, la organización agraria también hace un llamamiento a las autoridades competentes de las comunidades autónomas y ayuntamientos a realizar inspecciones "exhaustivas, inmediatas y especificas" sobre esta situación, así como que se impongan las sanciones correspondientes por estos graves incumplimientos.
"Otra vez nos imponen con la estrategia clásica de supermercados e hipermercados de presionar a la baja nuestros precios en origen en el inicio de nuestra campaña de producción con la entrada masiva de importaciones y provocando especulación. Perjudican a agricultores y productores de fruta de verano importando producto de fuera de la UE, que se cultiva con condiciones mucho menos exigentes de las que cumplimos aquí", ha subrayado.