Una mujer, aprovechando la confusión, le sisó el teléfono y la cartera, provocando en la hija de Rocío Jurado nervios y angustia al darse cuenta de que no tenía dos de sus bienes más preciados.
Día especial este jueves para José Ortega Cano, pero también para Gloria Camila, que ha estado trabajando mano a mano con su padre en los preparativos del museo taurino en honor del viudo de Rocío Jurado que ha abierto sus puertas en San Sebastián de los Reyes después de meses de intenso trabajo.
Radiante, flanqueada por su sobrina Rocío Flores y su novio David García, y especialmente cariñosa con su hermano José María - hijo de Ana María Aldón y el maestro - Gloria Camila acaparaba todas las miradas a su llegada a la inauguración con una sofisticada americana bicolor en blanco y negro con bordados de inspiración taurina.
Dispuesta a disfrutar de la gran noche de su padre y haciendo oídos sordos a los durísimos calificativos que poco antes les había dedicado Kiko Hernández en 'Sálvame' - llamando al torero y a su hija "asquerosos" o "defenestrados" entre otras lindezas - la influencer poco podía imaginar que iba a pasar de la risa al llanto en pocos minutos.
Y es que durante el acto - en el que se agolpó una gran multitud a las puertas del Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes, ávidos por ver a los rostros conocidos que quisieron arropar a Ortega Cano en la apertura de su museo - Gloria sufrió un robo. Una señora amiga de lo ajeno, aprovechando la confusión, le sisó el teléfono y la cartera, provocando en la hija de Rocío Jurado nervios y angustia al darse cuenta de que no tenía dos de sus bienes más preciados.
"Ahí lo tengo todo" se lamentaba sin poder contener el llanto, hundida en la gran noche de su padre. Por suerte, y después de un largo rato de incertidumbre, el terminal aparecía en un VTC, como la propia Gloria contaba aliviada ante las cámaras de Europa Press: "He recuperado mi móvil, está en un Uber. Ha aparecido. Se lo ha olvidado la señora en un Uber, se le ha caído. Hemos llamado al teléfono, ha dado tono y estaba en un Uber. Está terminando una carrera y viene ahora para acá".
"La cartera no sé si ha aparecido porque solo hemos llamado al móvil. Luego vamos a ver, pero es muy triste. Así va la sociedad" añadía, revelando que tiene grabada a la presunta ladrona pero no puede denunciarla porque no conoce su identidad: "Tengo la cara de la señora pero no sé como se llama".