Se intervino un rifle municionado, con silenciador y mira nocturna acoplados, y un visor térmico
Guardias Civiles del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Comandancia de Salamanca observaron un vehículo con dos varones que accedía, tras el ocaso, al valle de las Batuecas. Por ello, se establecía un operativo de vigilancia ante la suposición de que intentaran llevar a cabo caza furtiva. De hecho, ante los movimientos que llevaron los vigilados, los agentes decidieron identificarlos y fiscalizar los efectos que llevaban con el fin de evitar que pudieran abatir algún ejemplar.
Se trataba de dos varones residentes en Sevilla, que llevaban un rifle con silenciador y una mira nocturna acoplada a la mira telescópica, así como una mira térmica para facilitar la detección de las piezas en la oscuridad, además de munición para el arma. Ambos varones manifestaron carecer de licencia de caza, aunque el arma estaba cargada y en disposición de abrir fuego.
De igual manera se localizaron en el maletero dos mochilas con ropa de abrigo, gorros de lana y bufandas tubulares negras, además de pasamontañas de camuflaje y prismáticos. Por todo ello se procedió a la incautación del arma y los efectos hallados, y a la investigación de ambos como supuestos autores de los delitos de caza furtiva (caza en el interior de un terreno cinegético sin autorización administrativa), y por la utilización de artes o medios legalmente prohibidos.
De manera paralela, Guardias Civiles del SEPRONA de la Alberca, identificaron en la misma reserva a dos varones residentes en Vizcaya, con un total de 12 ejemplares de Becada recientemente cazadas. Se trataba de una actuación irregular, al ser el límite de piezas para dicha especie de tres por persona y día. Por lo cual se procedió a la formalización de un acta de infracción a la normativa autonómica de protección de las especies cinegéticas.