A juicio de los socialistas, la actualización de la ordenanza podría ser una buena oportunidad para adaptar las normas a las políticas medioambientales actuales
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca reclama la revisión de la ordenanza que regula la protección de zonas verdes y arbolado en la ciudad con el objetivo de proceder a su actualización y ampliación. Unas normas que señalan, "son del año 1996 y parte de su contenido se encuentra desfasado".
El PSOE trasladará este tema en forma de moción al último Pleno municipal del año, previsto para este viernes, 30 de diciembre, para poner en valor la "importancia de la naturaleza y de los árboles en el entorno urbano y su función para combatir partículas contaminantes, ayudar a enfriar el aire y contribuir también a mejorar la salud física y mental de la ciudadanía". En su argumentación, los concejales socialistas mencionan la retirada y talas de árboles de gran porte que se han producido en los últimos años e insisten en que el cuidado del arbolado debe ser una prioridad para el Ayuntamiento.
Con esta finalidad nació la ordenanza para la protección de zonas verdes y arbolado, para “determinar y normalizar la implantación, conservación, uso y disfrute de los espacios libres y zonas verdes del término municipal de Salamanca, tanto públicos como privados, así como los distintos elementos instalados en ellos, en orden a su mejor preservación como parte indispensable para el equilibrio ecológico y la calidad de vida de los ciudadanos”. Igualmente, promueve “la defensa de los especímenes arbóreos, arbustivos y elementos vegetales en general que albergan dichas zonas verdes”.
Sin embargo, han pasado más de 25 años desde su aprobación y, como señala el Grupo Municipal Socialista, l"a realidad es que, a día de hoy, esta ordenanza sigue mostrando la cuantía de las sanciones en pesetas y contiene un anexo de zonas de perros y otro con la relación de parques y jardines que disponen de juegos infantiles totalmente desactualizados".
A juicio de los socialistas, la actualización de la ordenanza podría ser una buena oportunidad para adaptar las normas a las políticas medioambientales actuales y para favorecer la protección del arbolado urbano en la capital salmantina, con la incorporación, entre otras cuestiones, de sanciones en euros, listados que se correspondan con la ciudad actual, exigencias de dotación de ejemplares, tamaño de alcorques, selección de especies adecuadas a cada lugar de plantación o calendario de poda según la especie.