Viernes, 26 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Los intensos y el frío
X

Los intensos y el frío

Actualizado 21/11/2022 14:11
Charo Alonso

Plumón de colores, los intensos y el frío hacen nube y se posan sobre los bancos a la hora del recreo, los cuellos tronchados hacia la pantalla que no les permitimos y que brilla, a escondidillas, en su palma abierta de inocencia. A los intensos les puede la luz y se agazapan tras las puertas o se meten en los baños a saciar su ansia de móvil, polillas de plumón, caritas ateridas. Salen en rebaño feliz haciendo chirriar las suelas de sus zapatillas de colores sobre las baldosas que se recorren mil veces camino del aula, avión de papel y mochila tirada. Los intensos lo son aún más cuando se acerca el viernes y suben sus voces en una algarabía de mirlos que duermen en los árboles de las ciudades.

Se refugia el niño en la casa caliente del invierno y sin embargo, a mis intensos les puede la calle y su intemperie, el gusto por mezclarse al sol que no calienta. Dan vueltas y se juntan con la azarosa geometría de las ondas, recorriendo el barrio con una bebida de colores en la mano sin guantes. Mis intensos prefieren estar fuera, callejero gato que ya no busca el abrigo del brasero ni el consuelo del radiador. A los intensos les gusta el calor del grupo más que el de la leche caliente, y es el niño, el niño que estrena la bufanda y el gorro de colores, el que mira por la ventana, acobijado en la casa que es abrazo, merienda y tarea de palotes. Se acerca el invierno con su fragmento de interior, su cálida condena, pero mis intensos siguen saliendo a conjurar su soledad aunque se hielan.

Hay algo en ellos que me conmueve a pesar de la constante cercanía y observo desde la ventana al profesor que acompaña al intenso castigado, en la tarea otoñal de recoger las hojas de una falta que se conjura con esfuerzo. Ahí están los dos, unidos en esa estación de la nostalgia, y recuerdo el poema de Rilke que me recita en su traducción personal, mi amigo el poeta. El mundo cae y algo sostiene, delicado y sutil, una hoja seca. Y es frente a la desdicha, a la falta, a la diaria proeza de vivir, cuando una imagen conjura todas las penas: la de un hombre y un muchacho recogiendo las hojas de este frío que a todos nos aterra. Hay esperanza entonces y cuando suena el timbre, de nuevo, los intensos se posan, liberados, cercanos, inocentes, todo alas y esperanza, a mirar las palmas de sus manos. Bandada feliz sobre la piedra.

Fotografía: Fernando Sánchez Gómez.

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.