"La propuesta inicial se queda muy corta, se circunscribe al núcleo central de la ciudad, que es donde menos tráfico existe al estar casi todo peatonalizado"
El Comité Antinuclear y Ecologista de Salamanca ha presentado sugerencias previas al Ayuntamiento de Salamanca, dentro de la consulta pública para la elaboración de la Ordenanza Reguladora de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Estas son sus aportaciones:
Como reflexión previa hemos de señalar que la elaboración de esta ordenanza llega muy tarde, puesto que no se va a poder cumplir el plazo que vence el próximo 31 de diciembre, (artículo 100 de la Ley 2/2011, de 4 de marzo, de Economía Sostenible).
A su vez, la citada ley fue aprobada en cumplimiento de las directrices y reglamentos emanados de la UE en materia de calidad del aire y emisiones contaminantes, así como de la propia OMS. No estamos pues ante un capricho ecologista si no ante un imperativo legal, comunitario y de salud pública. Si el ayuntamiento de Salamanca ha dejado para el final esta tarea ineludible, es porque realmente no ha tenido el suficiente interés para tener una ciudad saludable ya que la prioridad absoluta viene siendo, desde que desaparecieron los carros de tracción animal, el tráfico rodado individual y contaminante. Las calles para este consistorio son esencialmente viales para canalizar automóviles y luego ya si eso, peatones o ciclistas. Mientras tanto, cientos de ciudades europeas y algunas españolas ya han cambiado radicalmente su movilidad.
Por otra parte, la propuesta inicial del Ayuntamiento se queda muy corta, se circunscribe al núcleo central de la ciudad, que es donde menos tráfico existe al estar casi todo él peatonalizado. Por lo tanto, la disminución del tráfico y las emisiones no serán significativas. Ni siquiera se han dado datos de las emisiones actuales y las que se deberían conseguir con la implantación de la ZBE.
Es cierto que Salamanca consigue, en despachos, galardones de sostenibilidad pero la realidad es que entre el 30 de enero y 20 de febrero de 2022, era la ciudad con más índice de dióxido de nitrógeno, con 40 miligramos, de Castilla y León, según datos de mediciones difundidos por Ecologistas en Acción.
Entre las medidas que este Comité ha propuesto destacan las siguientes:
· La creación de Zona de Bajas Emisiones dentro de la segunda ronda: Avda. Portugal, Paseo del Rollo, San Antonio, Canalejas, Entrepuentes, La Transición, Peña de Francia.
· Creación de ZBE en los entornos de los centros educativos.
· Mejoras para vehículos de personas de movilidad reducida.
· Ampliación de estaciones de medición de emisiones en las zonas de tráfico intenso. Al menos de las dos actuales, mal ubicadas, a cuatro.
· Aumento de radares en zonas de “competición deportiva”.
· Ampliación de zonas peatonales en los barrios.
· Fomento de transporte público y de intermodalidad, reservando vías centrales de uso exclusivo de este y bicis y taxis.
· Cambio a medio plazo de la flota de autobuses a motor eléctrico.
· Así como otras medidas en materia de seguridad vial.