David Mingo y Francisco Miguel García Rodríguez, alcalde y concejal de cultura acompañaron a las autoras Carmen Borrego y Charo Alonso
Está de fiestas Santa Marta y la calle está tranquila esperando un anochecer lleno de alegría y en la nueva biblioteca Elio Antonio de Nebrija, recién estrenada, recién premiada, cubículo de luz, libro y verde se presenta una publicación de la Diputación de Salamanca y del Ayuntamiento de Santa Marta que retrata a una población joven, llena de calor, color y vida de la mano de su alcalde, David Mingo, y del responsable de cultura, coordinador del trabajo, Francisco Miguel García.
Un libro que, para David Mingo es una prueba de que tenemos que interesarnos no por lo lejano y lo imposible, sino por aquello que está cerca de nosotros, lo que vivimos día a día. Los rincones de un lugar que se vive desde su posición de alcalde “Con la satisfacción de que se está consiguiendo que la gente de Santa Marta sienta orgullo de sus raíces y que ese orgullo se transmita”. Hay pasión en sus palabras, la pasión de quien presume de los logros de una población que ha sabido evolucionar y que afronta el futuro creando riqueza desde la cultura, de forma dinámica, inclusiva, con atrevimiento… Y no es la primera vez que suenan estas palabras: cultura atrevida, deseo de hacer riqueza desde esa misma cultura que llena las calles y que atrae al visitante para que disfrute de la misma y a la vez, conozca el valor de la hostelería santamartina, un comercio de proximidad cercano y amable, una forma de vida sosegada y participativa en sus calles, en sus instalaciones deportivas, en sus espacios comunes que… gracias al río que nos lleva, ha convertido la Isla del Soto en un regalo para la Salamanca letrada que más allá de las rotondas se mira los lujos de la monumentalidad.
Recuerda David Mingo, es una publicación hermosa, como son las de la Diputación que el alcalde también representa y que con Aníbal Lozano a la cabeza logra la excelencia. Un libro de fotografías de Carmen Borrego, quien también realiza el diseño gráfico con el que el lector pasea por una población que supo conjurar el desmedido crecimiento urbanístico hecho para quienes querían una casa más barata, con proyectos que ahora ganen la calle a través de la cultura por medio de sus salas de exposiciones, su museo que es Ayuntamiento, sus murales, sus esculturas… Un paseo que la fotógrafa ha recorrido a lo largo de las estaciones del año, convencida de la importancia del detalle, de la necesidad de retratar la vida, de consignar y saber elegir las imágenes que relatan a una población joven y dinámica que según su alcalde “mira al río sin complejos, transmite pasión por lo conseguido y participa”.
Acompañar con textos breves la magnífica fotografía de Carmen Borrego, ha sido un placer emocionado que, en presencia de Juan Carlos López Pinto, artífice de Salamanca rtv al día, nació de nuestro trabajo periodístico. Un trabajo centrado en la cultura que tiene la satisfacción de disfrutar del trabajo de los pintores Daniel Martín, Caín Ferreras, Andrés Alén, el profesor y grabador reconocido mundialmente José Fuentes y la escultora Coral Corona. La presencia de los tres primeros es una alegría que va más allá de las páginas dedicadas a su trabajo: son ellos, junto con los artistas que exponen en las salas de la localidad, quienes con su generosidad, hacen el milagro cultural de esta Santa Marta nueva.
Una Santa Marta que para Francisco Miguel García Rodríguez, concejal de cultura, es localidad joven, que pasó de ser una alquería de Carbajosa a convertirse en una ciudad dormitorio que superó la época del desarrollo desordenado a través de la cultura, orgullo de todos y que ha conseguido que aquellos que no tenían otra opción que vivir en ella hayan construido con esa misma cultura una tradición, un arraigo, un legado.
Trabajo que quiere reflejar, como el río que nos lleva, los atardeceres junto a la ciudad monumental, el paso de las aguas, la diversidad de todas las propuestas, la vida en la calle de las gentes que hacen vida viviendo y disfrutando de los servicios que merecen, este libro es un recorrido, un paseo emocionado que invite al lector a adentrarse no solo por sus páginas, sino por sus estancias que la cámara de Carmen Borrego ha llenado de vida y de talento. Suyo es el mérito de recorrer la historia y todo lo bueno de un espacio de todos, de ahí que nos sorprenda con su paseo ahora convertido en libro, páginas de todos presentadas ahí donde se guardan: la recién estrenada, felicísima biblioteca.