La segunda edición de la subida a la Covatilla en esta moto clásica ha permitido volver a ver circular por la comarca a cerca de 50 modelos diferentes
La segunda subida a la Covatilla en Vespa, organizada por el Club Vespasión de Béjar, ha permitido disfrutar de la comarca bejarana a amantes de esta moto. Un día de convivencia en que además de recorrer kilómetros encima de medio centenar de Vespas, cada una diferente, han podido descubrir la cultura y belleza de Béjar y Candelario.
Uno de los objetivos que se marcaba la organización del evento es que este tipo de actividades impulse el turismo en la zona, y por ello se han llevado a cabo visitas guiadas a museos y espacios turísticos de Béjar como el Mateo Hernández o la Cámara oscura, además de un recorrido por las características calles de Candelario con un guía que ha ido detallando como era y es la vida en la villa corita.
El viaje hasta la estación de esquí de la Covatilla ha sido el punto álgido de esta matinal antes de volver a la ciudad textil para disfrutar de una comida de convivencia.