Cuatro detenidos como presuntos autores de 11 delitos que supusieron la sustracción de más de 3.500 metros de de este material, lo que afectó a más de 200 usuarios
La Operación MANGUCHA, llevada a cabo por la Guardia Civil, ha permitido esclarecer 11 delitos cometidos en el sur de la provincia de Salamanca, donde se robaron más de 3.500 metros de cableado de líneas telefónicas, un destrozo que afectó a 217 usuarios.
Agentes de la Benemérita, del Puesto de Ahigal (Cáceres), han logrado desarticular la banda, formada por vecinos de Béjar, que perpetraba estas actuaciones. De hecho, hay cuatro personas detenidas y tres investigadas, por su relación con estos robos de cable de cobre.
En este sentido, también se está investigando al responsable de una empresa autorizada para la gestión de residuos, con sede en Plasencia (Cáceres), por un presunto delito de receptación.
Según fuentes de la Guardia Civil, ya en marzo interceptaban "un vehículo, que circulaba por la autovía A-66, y en el que viajaban dos hombres, vecinos de Béjar (Salamanca), transportando cerca de 300 kilogramos de cableado de cobre, pertenecientes a líneas telefónicas, cuya legal procedencia no pudieron justificar".
Asi comenzó la “Operación Mangucha parar tratar de esclarecer los hechos y poder conocer la procedencia del cableado intervenido, averiguando que en el sur de la provincia de Salamanca se habían producido diferentes sustracciones de cableado telefónico, denunciadas por una empresa dedicada a la instalación de líneas telefónicas".
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Béjar (Salamanca) coordinó el trabajo y se concluyó que "todos los componentes de la organización criminal estaban asentados en Béjar".