Se incorpora un nuevo párrafo al apartado 4 de Anexo II de la nueva Ley de Caza en el que establece que: “Lo previsto en el segundo párrafo del apartado 1 no se aplicará en los supuestos de las letras a) a e) y g) de este apartado”
El pasado viernes 24 de junio, el BOCyL publicaba el “Decreto-Ley 2/2022, de 23 de junio, por el que se adoptan medidas urgentes para la agilización de la gestión de los fondos europeos y el impulso de la actividad económica”, norma en la que se incluye la modificación del apartado 4 del Anexo II de la Ley 4/2021, de 1 de julio, de caza y de gestión sostenible de los recursos cinegéticos de Castilla y León, y que trata de corregir el error por el que estaba prohibida practicar la caza mayor en la Comunidad durante tres días consecutivos.
De este modo, el apartado 4 del Anexo II incluye el párrafo: “Lo previsto en el segundo párrafo del apartado 1 no se aplicará en los supuestos de las letras a) a e) y g) de este apartado”, lo que posibilita la caza sin límite de jornadas consecutivas sobre las especies de caza mayor: ciervo, gamo, corzo, muflón, rebeco, cabra montés y jabalí.
Así, la aplicación del párrafo 2 del art. 1 del Anexo II de la Ley, y que dice: “En términos generales no se podrá cazar tres días consecutivos sobre las mismas especies, salvo que el plan cinegético lo contemple”, únicamente será efectiva en la caza menor.
Como recoge el BOCyL, la redacción anterior del Anexo II de la nueva Ley de Caza pretendía establecer una medida de protección adicional para determinadas especies de caza menor en temporada general y media veda, de manera que se modulase la presión cinegética sobre los ejemplares de un terreno cinegético; sin embargo, por su ubicación en el precepto, esta previsión se hacía aplicable también a las especies de caza mayor, lo que implicaba que los titulares cinegéticos que deseaban practicar la caza mayor tres o más días consecutivos se vieran obligados a solicitarlo, generando un enorme número de expedientes (se calcula que sería necesario modificar los planes de 4.632 cotos, siendo 5.528 el número total de cotos existentes en Castilla y León). Con esta modificación se evitará el problema, ofreciendo una redacción más clara que delimita con precisión la aplicación de esta norma, con carácter urgente dada la perentoriedad temporal respecto de la temporada de caza.