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"Hay que aceptarse, quererse, porque lo peor que le puede pasar a alguien es avergonzarse de ser quien es"
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Colectivo LGTBI+

"Hay que aceptarse, quererse, porque lo peor que le puede pasar a alguien es avergonzarse de ser quien es"

Actualizado 21/06/2022 00:45
Rosa M. García

Salamanca, asegura el presidente de la asociación Iguales, Oliver Marcos, "tiene una tolerancia muy rara, no estamos en el mejor de los lugares para reivindicar ciertas cosas"

Socialmente se ha avanzado en la tolerancia y en los derechos de las personas LGTBI, pero aún queda mucho por hacer. “Hay que reconocer que se ha avanzado bastante, hace 15 años era completamente impensable encontrarte en Salamanca a un chico con una falda y las uñas pintadas, y ahora es lo más habitual del mundo y no pasa absolutamente nada y nadie se lleva las manos a la cabeza cuando ve algo así, pero todavía queda bastante por avanzar”.

Así lo asegura el presidente de la asociación Iguales, Oliver Marcos, que añade, que además “están resurgiendo discursos de odio hacia el colectivo, impulsados por medios de comunicación y por sectores políticos que cada vez tienen mayor influencia social”. Es como si quisieran “retrocer” y en algunos sitios lo están consiguiendo.

Salamanca es tolerante, asegura, pero “tiene una tolerancia muy rara”. En este sentido, explica, “puede parecer una ciudad tolerante, porque no te vas a encontrar a alguien gritar ‘maricón de mierda’ en mitad de la calle, porque ese tipo de gestos no son los comunes, pero tienes ‘tus liaditas’, hay gente que te mira raro cuando estás en la calle como diciendo estos qué hacen aquí”. Son situaciones de una violencia “como un poco más invisible, pero que sigue existiendo”.

Y es que, señala, hay que tener en cuenta que Salamanca es una ciudad “envejecida, muy conservadora, muy católica… no estamos en el mejor de los lugares para reivindicar ciertas cosas, porque ya contamos con muchos elementos en contra”.

Educación integral en las etapas escolares

Para una mayor tolerancia, es necesaria una educación desde la infancia. “Nuestra apuesta siempre ha sido por una educación integral de las personas en las etapas escolares, porque al final es donde más tiempo pasan. Creemos que sería importante, porque hay que atajar la raíz del problema y las familias, en función de con quien te críes, tienes unos pensamientos u otros… es un poco delicado, pero hay muchas personas LGBTI que quieren mostrarse como son y que por vivir en entornos hostiles, conservadores, de mentalidades más cerradas, pues no pueden y se tienen que reprimir”. Esto es algo que “nos aterra”, que “ciertas personas estén pasando adolescencias y juventudes o infancias que no les corresponden solo por el contexto en el que están”.

Este tipo de familias “no lo aceptan y quieren como ocultarlo, que no se te note, que nadie se entere y es lo peor que le puede pasar a alguien, avergonzarse de ser quien es”.

También sería necesaria una Ley donde se recojan los derechos LGTBI, pero Castilla y León “forma parte de las dos últimas comunidades en España que no tienen ninguna Ley específica hacia el colectivo; la otra es Asturias, que ya empezado a trabajar en un borrador”, comenta Marcos. Recuerda que en nuestra comunidad se ha trabajado varios años en un borrador, pero no ha salido adelante, porque “el PP no querido; y si con PP y Cs no salió adelante, pues con PP y Vox, menos”.

“No sería extraño acabar siendo la última comunidad en tener una ley, si es que se llega a tener”. Por eso, es necesario que se apruebe ya la Ley estatal, que se está tramitando, ya que “nos garantiza cierta protección que actualmente no tenemos” en Castilla y León.

"Tienes que pasar por el psiquiatra para que te diagnostique tu problema mental"

Los problemas del colectivo LGTBI+ son de todo tipo: familiares, sociales, laborales y también sanitarios.

Sobre este último, explica Oliver, cuando se tiene que hacer un proceso de transición, hay que hormonarse, como paso previo a una posible cirugía. Pero cuando hay que pasar por un proceso así, “tienes que pasar por un psiquiatra, que te tiene que diagnosticar disforia de género”. En 2018 la transexualidad dejó de estar catalogada como una enfermedad, pero en España eso no está actualizado y en Castilla y León “siguen solicitando que ese informe de disforia de género exista para pasar por todo el proceso”.

Es decir, los tratan como si fueran enfermos. “Si eres una persona trans, tienes que pasar por el psiquiatra para que te diagnostique tu problema mental”, lamenta.

Parece que se ha avanzado poco en el tema sanitario, en el que además “es complicado entrar” en Castilla y León. “La administración se cierra a protocolos desfasados, a una no transparencia de un montón de documentación, a muchas objeciones de conciencias; además es una zona en la que el sector sanitario es muy conservador”, afirma.

En cuanto a la discriminación laboral, asegura que depende de la persona y del ámbito en el que se mueva. “Aquí en Salamanca mucha discriminación no recogemos; es cierto que a veces sí hay algún insulto, alguna agresión, pero, por suerte, no es lo habitual”. Sin embargo, hay personas que sí lo pasan mal, dependiendo del “contexto en el que se mueve”. La intención de Iguales es “eliminar cualquier tipo de barrera que pueda seguir sufriendo la gente para que pueda tener una vida lo más cómoda posible, sin ningún tipo de obstáculo y siendo quienes quieren ser”.

Un mensaje a los que no se atreven a comunicar su situación

A las personas que no se atreven a ‘salir del armario’, Oliver Marcos les quiere decir que “no están solas, que aquí somos muchas las que somos iguales que ellas”. Y lo segundo, “que no se avergüencen de quienes son”.

Pero, a veces, “es cierto que no se cuenta con un contexto, un espacio seguro para poder visibilizarse, es una realidad que no se puede ignorar”. En este sentido, alude a una persona que viva en un pueblo pequeño, “no es un entorno seguro para que lo digas y es completamente comprensible para que lo tengas callado”. Pero él insta a que “no se avergüence de ser quien es, porque eso es lo más importante, que acepten quienes son y se acepten con cariño, que se quieran, cuiden y no se avergüencen, porque eso es lo peor que les puede pasar a alguien, avergonzarse de ser quien es”