Un ejemplo de pasión y servicio por ayudar a la sociedad

Desde su llegada a nuestras vidas, el coronavirus nos ha dejado historias que muestran el lado más humano de la sociedad actual: Los aplausos a los sanitarios durante el confinamiento, la ayuda desinteresada entre vecinos con aquellos que más lo han necesitado e incluso de la vuelta a su trabajo, de manera voluntaria, de profesionales jubilados en diversos ámbitos laborales para echar una mano.

Quizás estos momentos recuerden a la época mas dura de la pandemia, a las primeras horas, pero las ganas de sumar y ayudar a sus compañeros siguen vivas en cuatro médicos jubilados de Béjar que han regresado a su trabajo para aliviar la carga que la sexta ola ha dejado en la atención primaria.

Es el caso, por ejemplo, de Pedro Pablo Sánchez, quién dejo su actividad sanitaria hace tres años y que ha regresado estos días al Centro de Salud bejarano. Pedro se muestra “encantado de volver, para mí es ilusionante volver a estar en contacto con la profesión, con los compañeros. Hay cierto factor emocional en todo esto” asegura este medico bejarano. Tanto Pedro como el resto de compañeros, han estado más de 30 años trabajando y viviendo en Béjar y eso genera “un vinculo y un compromiso con la sociedad, pero sobre todo nos identificamos con la situación que viven los compañeros y queríamos echar una mano”.

Una idea de vuelta al trabajo voluntaria que surgió al “ver el estrés de nuestros amigos y a la vez compañeros, la saturación y notar cierta dosis de crispación en la sociedad. Y decidimos que teníamos que hacer algo” explica Pedro Pablo.

La coordinadora del área de salud de Béjar, la doctora Concepción Oñate Regojo, pone en valor que la iniciativa ha salido de ellos mismos y que “están ayudando muchísimo y aportando una ilusión tremenda. Es increíble la labor que están llevando a cabo Pedro, Julián, Verónica e Isabelino. Nos están dando una lección a todos.” Sin embrago, esta acción altruista de estos médicos deja al descubierto las carencias de personal que sufre la sanidad en la comunidad. Tal y como explica la coordinadora, a la explosión de la sexta ola generada por la variante ómicron se ha unido que “algunos compañeros tenían sus vacaciones, hemos sufrido contagios en algunos otros y nos hemos visto sobrepasados. Pero nuestra ciudad ha sido de las pocas en las que hemos tenido la fortuna de que cuatro profesionales hayan decidido volver de forma voluntaria “detalla la doctora Oñate Regojo.

El reencuentro con estos médicos también refleja sorpresa en los pacientes al escuchar la voz de un conocido “y es muy grato que te reconozcan, que se acuerden de ti. Esta es la esencia de la atención primaria: La relación medico-paciente es mas estrecha y cercana y es la base principal de la misma”. Estos cuatro médicos se están encargando de tramitar altas y bajas y realizar el seguimiento de los enfermos COVID ha través del contacto telefónico.

En el caso de Pedro Pablo Sánchez, es su segunda vuelta debido a la pandemia. Ya regreso durante las primeras olas y señala algunas diferencias entre esa experiencia anterior y la actual “en el inicio de todo estábamos asustados, no teníamos los medios de protección adecuados, etcétera. A día de hoy, con las vacunas y el conocimiento, aunque haya saturación, todo esta más controlado y se trabaja mejor” señala este profesional sanitario.

Casos como el de estos médicos bejaranos, que de manera desinteresada han decidido regresar a la actividad con el animo de ayudar a sus compañeros y a la población de la que son vecinos, pone de manifiesto que la pandemia, también sirve para mostrar el lado mas amable y solidario que habita en nosotros.