Se suspendió la huelga convocada del 20 al 22 de diciembre, pero podrían producirse nuevas protestas
CCOO ha asegurado que el acuerdo alcanzado la pasada semana entre el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC) de mercancías y el Gobierno para desconvocar el cierre patronal programado para los días 20, 21 y 22 de diciembre no resuelve los problemas del sector y que, además, es un reconocimiento de la "incapacidad" de los empresarios del sector para gestionar su actividad en el marco de una economía de mercado.
Según el sindicado, este acuerdo es un "rescate" del Gobierno a la "autodestrucción a la que lo han llevado con sus malas prácticas" y en el que el Ministerio ha accedido sin exigir "ningún compromiso que garantice la recuperación social del sector ni de la dignidad de los conductores profesionales".
En este sentido, CCOO denuncia que "como si de ordenanzas laborales franquistas se tratara", las empresas y el Gobierno indican a los trabajadores las tareas que deben realizar y fijan las condiciones y los servicios de las zonas de carga y descarga, entre otros puntos.
"Estas medidas no resuelven los problemas del sector, solo rescatan a los empresarios por un tiempo hasta que la competencia desleal y la atomización del sector se coman el rescate", reza el comunicado.
Por ello, desde el sindicato piden al Ministerio de Transportes, liderado por Raquel Sánchez, que se elabore un plan de recuperación social del sector de transporte de mercancías por carretera que contemple la creación de una mesa social permanente y tripartita para el transporte de mercancías por carretera, medios y coordinación administrativa contra el fraude en los sistemas de retribución salarial o la jubilación anticipada mediante coeficientes reductores, entre otras exigencias.
Finalmente, rechaza que el sector se reforme "a espaldas" de los representantes de los trabajadores o se rescate a las empresas del sector "y se ahoguen a los trabajadores", por lo que hace un llamamiento a las organizaciones sindicales para que se organicen movilizaciones que conduzcan a la "recuperación de la dignidad de los trabajadores" entre las que no se descarta una "huelga general".