Tras 65 años como socio de esta institución, asume el cargo "ilusionado" y "entregado a cuerpo y alma"
Pedro Méndez es el nuevo presidente del Casino de Salamanca. Con esta nueva responsabilidad, este salmantino que es socio de esta institución desde hace 65 años, sustituye a Alberto Estella, con quién ha trabajado ya en los últimos años.
Desde que tomó las riendas del Casino, está "entregado a cuerpo y alma" y cada día trabaja para lograr mantener la categoría de este emblemático edificio que acumula ya más de dos siglos de historia y es un referente en la ciudad.
¿Cuáles son los retos a los que se enfrente con presidente?
Los retos son muchos y yo asumo esta nueva etapa con muchas ganas. Venimos de una época muy dura provocada por la situación sanitaria y eso nos obligó a tener cerrado el Casino durante 17 meses, ha sido duro. Tengo que resaltar el comportamiento de los socios, pues se bajó a la mitad la cuota para poder seguir contando con su apoyo y la gente respondió bien. A partir de septiembre se empezó a recuperar la normalidad y se volvió a la cuota fija de antes de la pandemia, que por cierto, es muy asequible para todas las personas: el matrimonio paga 35 euros/mes, y una persona individual 24 euros/mes. El Casino está volviendo poco a poco en ser un punto de encuentro y nuestros retos pasan por seguir promoviendo actividades culturales y sociales. Yo tengo una predilección por la música clásica y vamos a mantener las actuaciones de la Orquesta de Cámara del Casino de Salamanca y ya en noviembre van a dar el primer concierto tras el parón. Además, en lo que va de mes ya hemos acogido presentaciones de libros, conferencias? y estoy en negociaciones con los directivos del Conservatorio de Salamanca para que puedan dar aquí diferentes conciertos. A la gente le gusta venir a actuar, a presentar trabajos, y para nosotros es muy satisfactorio.
¿Qué más hace atractivo el Casino para los socios además de las propuestas culturales?
El lugar en sí mismo. Es un edifico maravilloso, en el centro de Salamanca y que cuenta con todos los servicios. Los socios pueden venir a realizar actividades lúdicas como partidas de cartas, jugar al dominó, etc., porque tenemos unas salas habilitadas para ello con todas las garantías de calidad y confort; tenemos una completa biblioteca, un salón de actos en el que se proyectan películas, salas de televisión para poder ver los partidos de fútbol o las corridas de toros? es una maravilla para todos los socios que acuden aquí.
¿Cuántos socios tiene actualmente el Casino?
Ahora mismo contamos con 527 socios, pero en las últimas semanas esa cifra no para de subir, y eso es algo que me ilusiona.
¿Hay espacio para la gente joven?
Por supuesto que sí, siempre lo hay. Estamos trabajando para poner en marcha actividades para ese público más joven y puedan acercarse al Casino como una sesión de Jazz que tenemos para finales de este mes o un acto en el que contaremos con la Big Band de la Universidad de Salamanca que es una agrupación musical con mucho tirón entre la sociedad salmantina. Tenemos muchas ideas porque es muy importante que los jóvenes vean el Casino como un punto de encuentro también para ellos y no sólo como algo antiguo e inaccesible.
Estadísticamente, la edad media de los socios estaba casi en los 80 años pero en los últimos años ha bajado esa media y ese también es uno de nuestros objetivos, por eso hemos incorporado en la Junta directiva a una persona con 56 años, que es actualmente el socio más joven. Hay que darle continuidad al Casino y los jóvenes juegan un papel fundamental.
Un mensaje para la ciudadanía.
El mensaje que mando es una invitación para que toda la sociedad salmantina venga, que se una a este proyecto, que sepan que estamos aquí, que no vamos a parar de trabajar para que el Casino siga siendo un punto de encuentro y un referente. En cuanto a la programación, hemos llegado a superar algún año los 250 eventos culturales, y nuestra idea es seguir creciendo. Estamos abiertos a todo tipo de propuestas literarias, culturales y musicales siempre que se garantice el nivel. El Casino tiene mucha vida y por mi parte, si en los últimos años de mi vida logro que se impulse, ya estaré satisfecho.