Las peticiones de urgencia descendieron un 11 % respecto al mismo periodo del año pasado
La Gerencia de Emergencias Sanitarias de la Junta de Castilla y León atendió en el primer semestre del año un total de 142.285 llamadas en demanda de ayuda médica urgente, un 11 % menos que en el mismo periodo del año pasado, en el que, a causa de la primera ola pandémica, se registraron 160.027 llamadas. Esto supuso la atención directa a 131.262 personas (156.729 el año 2020), gracias a la movilización permanente de los más de 1.500 profesionales que trabajan en este servicio esencial y de los 163 vehículos que la Consejería de Sanidad destina a la cobertura de emergencias.
Las 142.285 llamadas gestionadas por Sacyl supusieron la movilización de 148.868 recursos sanitarios, como ambulancias o helicópteros medicalizados, para darles una solución especializada. La cifra de recursos empleados es siempre superior a la del número de llamadas realizadas, lo que se debe a que, en ocasiones, la resolución de un incidente requiere de la participación de varios de ellos.
Gracias a la intervención de estos recursos públicos asistenciales pudieron ser atendidas un total de 131.262 personas, de las que 8.620 lo fueron en la provincia de Ávila, 19.669 en la de Burgos, 23.363 en León, 9.106 en Palencia, 18.474 en Salamanca, 7.199 en Segovia, 4.469 Soria, 30.913 en Valladolid y 9.449 en la provincia de Zamora (ver cuadro adjunto para más información provincializada).
La media diaria de llamadas por demanda asistencial al Centro Coordinador de Urgencias (CCU) ascendió a 32 en el primer semestre (por cada 100.000 habitantes), de las que un 83 % necesitó la movilización de algún tipo de recurso. Como dato curioso, un 81 % de esas llamadas se realizaron en horario diurno, y un 16 % se solucionaron con un consejo telefónico, sin necesidad de movilizar recursos.
Un 70 % de estas llamadas gestionadas por la Consejería de Sanidad procedían del propio paciente o de un familiar, mientras que los profesionales de Atención Primaria realizaron un 22 % (el resto de llamadas son de testigos o de personas del entorno del suceso).
Otro dato que refleja la actividad del servicio sanitario es la atención a los heridos en accidentes de tráfico. Las carreteras generaron, en los primeros seis meses del año, un total de 2.070 intervenciones por parte de los profesionales de emergencias sanitarias, que supusieron el 1,66 % sobre el total de avisos atendidos por el CCU.
La causa más frecuente entre todas las llamadas registradas en el Centro Coordinador de Urgencias fueron, en el periodo considerado, los traumatismos, con un 19 % del total. Los ciudadanos llamaron también, en un 12 % de las ocasiones, por enfermedades infecciosas o parasitarias, y en un 11 % por problemas de salud relacionados con el aparato nervioso y órganos sensoriales. También se recibieron peticiones de ayuda relacionadas con enfermedades del aparato circulatorio (10,7 %), trastornos mentales (6,7 %) o del aparato circulatorio (6,8 %).
Los recursos de los que dispone en estos momentos la Gerencia de Emergencias de Castilla y León para la atención directa de pacientes son los siguientes: el Centro Coordinador de Urgencias, 23 ambulancias de soporte vital avanzado (conocidas como UMEs), 17 unidades para traslados entre hospitales, 3 helicópteros medicalizados y 117 ambulancias de soporte vital básico.