“Notamos un cambio de hábitos en la gente, sobre todo entre semana. Vienen menos y los mayores...

Que la Hostelería ha sido y es uno de los sectores más golpeados y sensibles a una pandemia que hoy ya suma la quinta ola de contagios Covid es algo más que una obviedad en la capital, pero que, en el medio rural, tiene un acento mucho más destacado, que está llevando al límite a no pocos empresarios del sector.

Hosteleros que, desde que levantan la persiana cada mañana, convierten sus jornadas en una lucha por tratar de volver a una realidad que hace algo más de un año era una rutina en su día a día: la de recibir a clientes y trabajar con buena marcha.

Dentro del gremio nos encontramos con pequeñas islas que ahora, con la llegada del coronavirus, parecen tener otro impacto y mayor notoriedad: los bares de barrio.

Un buen ejemplo de esto lo encontramos en el Bar Peñaranda. Un establecimiento peñarandino y familiar, con décadas de historia a sus espaldas, su mezcla única de café y su tapa de sardina como buques insignia, que vive ahora una etapa de mayor esfuerzo con la llegada del coronavirus y los cambios que ha generado en la sociedad.

Paulino Sánchez es actual gerente del establecimiento, junto a Manuel Rodríguez, y explica que el verano de 2021 es muy diferente a los anteriores. "Este sin duda

es mejor que el pasado, las restricciones no ayudan claro esta? pero lo que no se nota mucho es la recuperación de la actividad que teníamos antes de la pandemia a diario. Igual que el fin de semana estamos trabajando más incluso que antes, de lunes a viernes ha decaído muchísimo".

Sobre las posibles causas de esta nueva situación, Paulino explica que "quizás sea un cambio de tendencia o de hábitos en la gente?Antes teníamos muchos clientes, trabajadores principalmente, que venían durante la semana. Hoy ese es el público que estamos echando en falta".

Además de estas ausencias, también pone el acento en la falta de gente mayor. "Habitualmente los mayores venían a echar la partida, pero han desaparecido por completo. Tienen miedo y ya no vienen" mientras que asegura que la situación económica "la hemos aguantado agarrándonos fuerte y sufriendo. Hemos tenido meses malos pero hemos conseguido tirar para adelante como hemos podido".

A pesar de todo esto, Paulino se muestra confiado y positivo en el inminente mes de agosto, del que asegura que "será mejor sin duda. Si hay medidas restrictivas no creo que sean tan difíciles como las pasadas, por lo que a peor no iremos, seguro".