¿Puedes compartir una casa rural con amigos esta Semana Santa en Castilla y León?

Este viernes, y hasta el próximo 9 de abril, entran en vigor en Castilla y León las medidas especiales y extraordinarias para prevenir los contagios de Covid-19 en Semana Santa que fueron aprobadas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, y la primera de estas medidas es que se limita la permanencia de grupos en espacios públicos, ya sean estos abiertos o cerrados, a un máximo de cuatro personas, salvo que se trate de convivientes; en espacios privados, las reuniones se limitarán únicamente a convivientes.

Una de las consecuencias de esta medida es que esta Semana Santa no se podrá compartir casa rural o alojamientos compartidos con personas no convivientes. Se da la circunstancia de que Semana Santa es uno de los periodos del año en los que el turismo rural es una opción preferente para muchos viajeros. Aunque esta Semana Santa se mantienen los cierres perimetrales de comunidades autónomas como Castilla y León, sí se permite la movilidad entre sus provincias.

Esta restricción, sin duda, supone un revés para el sector del turismo rural, seriamente golpeado por la pandemia. Esta medida hace además inviable la apertura de muchas de las casas rurales con un mayor número de plazas.

Esta misma semana desde la Plataforma S.O.S. Turismo Rural Castilla y León aseguraba que la ocupación, tanto en el puente de San José como para Semana Santa, "está resultando nula o muy escasa, en los alojamientos rurales de nuestra región, afectados por el cierre perimetral que no permite la llegada de viajeros de otras comunidades, especialmente la madrileña y por el escaso aforo de cuatro personas máximo en los establecimientos, lo que dificulta y hace inviable las reservas", señalan en un comunicado.

Desde que se iniciara la pandemia, añadían, la ocupación de las casas de turismo rural "ha sido nula, sin que se registrara ninguna reserva que hiciera viable el negocio del turismo rural, salvando la excepcionalidad de los meses de julio y agosto, cuando las medidas de confinamiento y restricción de movimientos fueron más permisivas".