En el siglo pasado hubo una filosofía de los valores, que, entre otros, defendió el filósofo alemán Max Scheler, que intentaba poner los fundamentos para orientar la acción humana a la búsqueda del bien, la verdad y la belleza. Estos son los fines que, por otra parte, están en la conciencia del hombre identificados con la felicidad. Quizá el hombre de hoy, aunque en una sociedad decadente, tiene en su conciencia la tendencia natural a esos fines y, en último término, la aspiración a la felicidad. Pero esta filosofía de los valores está hoy olvidada o al menos no tiene influencia en la sociedad. Podríamos preguntarnos el por qué.
La respuesta puede estar en los fundamentos. ¿Dónde pone los fundamentos de la verdad, de la belleza y del bien el hombre del siglo XXI? Hoy se habla de la "cultura de?" todo. Me refiero a la cultura dominante; sabemos que hay muchas personas que tienen valores y principios bien fundamentados. Pues bien, las "noticias falsas" (le han puesto nombre en inglés como si no estuviera bien claro en castellano), ¿pueden ser fundamento de la verdad? ¿De qué habla la gente? ¿Qué tiene hoy valor para la sociedad? Por lo que oímos y vemos, los millones que gana uno con suerte dando patadas a un balón. Puede ser que para muchos eso sea lo más grande y más hermoso a que puede aspirar un ser humano.
En este mundo de relativismo se han perdido los valores absolutos. Cada uno puede escoger a la carta los placeres y los gustos que les pueda ofrecer una pasajera felicidad que le ofrece la modernidad, con todos sus colores, olores y visiones de mundo fantástico, que bebemos con avidez como sedientos de gozos efímeros.
La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.
Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.
La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.
En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.