Los vecinos de Peralejos de Abajo no se quedan sin sus gargantillas de San Blas
El Ayuntamiento repartió casa por casa un menú formado por embutidos de entremeses, paella, tarta y licor, todo en recipientes independientes
Con una misa casi en la intimidad, y un menú repartido puerta por puerta, los vecinos de Peralejos de Abajo celebraron este 3 de febrero la festividad de San Blas, actos que se han visto condicionados por la pandemia de coronavirus. Aun así, los vecinos de Peralejos de Abajo no renunciaron a tener su gargantilla bendecida por San Blas, que confían en el santo para que les cuida de los males de garganta.
Finalizados los actos religiosos, oficiados por el párroco Francisco Fraile, los voluntarios municipales procedían a la preparación del menú-convite ofrecido por el Ayuntamiento con motivo de esta festividad.
Embutidos y queso de entremeses, paella de plato fuerte y tarta san marcos de postre, acompañada de una botella de licor, fueron los ingredientes del menú repartido puerta por puerta y en recipientes independientes, cumpliendo así todas las medidas sanitarias y de higiene alimentaria.