Los vecinos están trabajando para reestablecer el agua potable y protegerlos
Dos mañanas con temperaturas de incluso doce grados bajo cero y jornadas heladoras tienen sus consecuencias. Varias tuberías y contadores se han congelado. Ayer en pueblos como Cantalapiedra, Poveda de las Cintas y Villoria, los vecinos afectados se afanaban en intentar deshelar las cañerías y protegerlas con el fin de evitar males mayores.
Sobre todo preocupan en estas localidades las viviendas habitadas, aunque con mayor probabilidad se han congelado tuberías en segundas viviendas, locales o corrales.
Otras de las consecuencias del temporal en la vida cotidiana ha sido la imposibilidad de retirar los residuos de algunos contenedores, razón por la cual los Ayuntamientos invitan a los vecinos a depositar las basuras solamente en contenedores que no estén llenos.