Durante aproximadamente un mes permanecerá cerradada por las obras de reparación que se van a acometer sobre la fachada de la Iglesia de los Capuchinos
La calle Ramón y Cajal, en el tramo comprendido entre las calles Ancha y Fonseca, permanecerá cerrada al tráfico desde este lunes y durante un mes con motivo de las obras de reparación que se van a acometer sobre la fachada de la Iglesia de los Capuchinos.
Para facilitar la subida de vehículos desde la Vaguada de la Palma hasta el Paseo de San Vicente se invertirá el sentido del tráfico de la Cuesta de San Blas, que mientras dure este corte será de subida y no de bajada como hasta ahora.
Por otro lado, los días 1, 2 y 3 de diciembre está previsto que se lleven a cabo los trabajos de aglomeración de la nueva glorieta de acceso al barrio Puente Ladrillo. Por este motivo, en este punto, la calle Jesús Arambarri permanecerá cerrada al tráfico durante estos días y se habilitará un desvío provisional de vehículos por la avenida Santiago Madrigal.