“El machismo ha hecho tanto daño a la mujer como al hombre”

"Escucha entiende y respeta mi NO" es una novedad editorial cuya autoría se debe a Ruth Esther Méndez Mateo, dominicana con residencia en Salamanca y muy vinculada a Villoria, a donde acude siempre que es posible y en dónde ya ha puesto en marcha varias de sus originales iniciativas o ha participado en otras propuestas culturales o sociales. En la presente entrevista conocemos un poco más a Ruth y su nuevo libro.

• Ruth hablenos un poco de usted y su trayectoria académica.
• Soy Ruth Esther Méndez Mateo, de nacionalidad dominicana con residencia en Salamanca, España. Vine a España después de haberme ganado una beca para hacer un máster en TIC en la USAL, producto de haber alcanzado el honor Magna Cum Laude en la licenciatura que hice en la carrera educación Mención Gestión educativa, título que más tarde se e fue homologado por un título oficial español de pedagogía.

Un año más tarde, se me otorgó otra beca para realizar una investigación de tesis doctoral en TIC, pero en la temática de la educación sexual por medio de las tecnologías. De esta investigación he podido presentar artículos en diferentes revistas científicas y hacer ponencias en congresos de otros países e inclusive en representación de la USAL.

Poseo otras tantas preparaciones académicas, que por factor espacio no detallo en esta entrevista, pero he perfilado más en lo que tenga que ver con la orientación de la sexualidad y terapias de pareja.

• ¿Qué le une a Las Villas-Villoria?

En primera instancia, me une mi esposo que es de Villoria y su familia, además de muchas personas, de las cuales he recibido buen trato y buena acogida. En segunda instancia porque tuve la oportunidad de ofrecer actuaciones teatrales y a la verdad que vi el apoyo de la gente del lugar con su asistencia y su buena cara al salir del mismo, además de las enhorabuenas.

• Escucha entiende y respeta mi NO

Tal como se puede leer en el título, él mismo habla solo. Este libro aborda los temas referentes a relaciones de pareja, cómo saber si se es víctima o victimario, distinguir acciones que muy lejos del amor, solo llevan intenciones de control y subyugación sobre una de las partes. En el mismo, se detallan características que pueden prevenir malas actuaciones en la relación, e inclusive, orientar a las personas antes de entrar en una relación seria y comprometida.

• ¿Está dirigido a algún perfil específico de personas?
• Aunque el título menciona violencia machista, este libro está dirigido tanto a hombres como a mujeres con relaciones de pareja o sin ella, también para aquellos que aún no hayan entrado en una relación seria, ya que en el mismo encontrarán características tanto de hombres acerca de los tipos de mujeres, como de las mujeres acerca de los tipos de hombres, de los cuales ambos deben conocer antes de unirse en pareja, y si ya se está, cómo mejorar las situaciones.
• ¿A quién se lo recomendaría?

Se lo recomiendo a todas las personas con edad de elegir pareja, sin distinción de sexo, ideología, ni raza, puesto que el mismo está expresado en un lenguaje sencillo, centrado, conciso y entendible para todos.

• ¿Cómo surgió escribir este libro?

El escribir este libro, se debe al dolor social que siento al ver tanta violencia entre las parejas, desamor, falta de diálogo, control, manipulación, abusos, maltratos, escasa orientación directa, y lo peor los asesinatos por parte de cualquiera de los dos y los feminicidios.

Yo fui víctima de violencia doméstica y hasta que no profundicé en estudiar este tema, no me di cuenta en el peligro que me hallaba, pero gracias a Dios tuve el valor de salir de esa relación abusiva y hoy me siento en plena capacidad de orientar a miles de personas que estén atravesando tan delicada situación y que no encuentran solución a la misma.

• ¿Qué consejo destaca?

Yo diría que todos los citados en el libro; pero de prevención, recomendaría observar bien las características de la persona con quien se piensa entrar en una relación seria, saber que el amor es ciego, pero el matrimonio abre los ojos y que el amar no quita conocimiento, que se ame, pero sin perder la razón y mantener la realidad de frente y afrontarla.

• ¿Considera que la formación por parte de las parejas en esta materia evitaría problemas de abusos, acosos, violencia machista e incluso crímenes?

Sí, puesto que hay mucha necesidad de ser orientados y la herencia que hasta ahora permea de cosas que ni idea tenemos de que se trata de abuso y control, son vista como normal, por creer que son normales, pero en su trasfondo, pertenecen al dominio, subyugación y control sobre uno de los conyugues.

Se hace necesario dar a conocer las costumbres que hemos heredados y acabar con ellas, para así ir disminuyendo el machismo que estoy plenamente segura que ha hecho más daños al propio hombre que a la mujer, ya que si vemos desde nuestros orígenes, la mujer era la encargada de criar y ella misma fomentó el machismo dentro de los hogares y luego ha tenido que luchar con este mal.

¿Opina que son extendidos los casos de relaciones no consentidas por alguna parte dentro de las parejas?

En algunos países sí, pero en otros, cada vez hay menos, ya que hay más medios de comunicación y más centros de ayuda a los que acudir. Sin embargo, aun así, en muchas parejas se da el control totalitario, donde una de las partes es sometida por la otra y sufre abusos y maltratos de diferentes índoles, es silenciada, amenazada constantemente e incluso asesinada sin rastro. De estos se dan muchísimos casos, no solo de hombres con las mujeres, sino de mujeres hacia hombres, los cuales por vergüenza de perder ser "macho" no se atreven a denunciar y al encontrarse entre la espada y la pared, suelen reventar en más violencia o asesinar.

• ¿Ofrece alguna clave para evitar esto?

Esto es un mal con raíces muy viejas y arraigadas, pero creo que la clave estaría en formar mejor a los hijos y las hijas actuales, para que mañana sean mejores esposos, esposas y por ende mejores padres y mejores madres.

En cuanto a las parejas ya unidas, deben buscar ayuda profesional, no pueden quedarse callados, para luego ser atrapados por la impotencia de no hallar solución a su situación y ver la única escapatoria cometer algún crimen contra su pareja, o contra él o contra ella misma y contra los progenitores como últimamente se viene dando.