Aumenta el consumo de legumbre del terreno

La Lenteja de la Armuña y el Garbanzo Pedrosillano se han puesto en valor con la situación de alarma sanitaria. El consumo de la legumbre "aumentó entre un 20 y un 30% durante el confinamiento", detalla Nicolás Armenteros, director técnico de Legumbres de Calidad. Quien considera que este incremento en la presencia de estos alimentos de calidad en las cocinas españolas, también tiene que ver con la mayor disponibilidad de tiempo que tuvieron los ciudadanos para estar en los hogares para realizar los guisos a fuego lento, casi como los hacían nuestra abuelas.

También puede ser que el "temor de la gente" propiciará el acopio de estos productos no perecederos. Además se trata de materias alimentarias que "cunden mucho", explica Armenteros, es decir, "redunden mucho porque con unos quilos, una familia se puede alimentar durante varios días" . Estas son sólo algunas de las ventajas de estos alimentos producidos en las tierras de la provincia.

El Garbanzo Pedrosillano cuenta con Marca de Garantía, la Lenteja de la Armuña con Indicación Geográfica Protegida, al igual que el Garbanzo de Fuentesaúco y las Judías del Barco de Ávila. Estos sellos entre otras cuestiones controlan todo el proceso de elaboración. De que se hagan bien las cosas vela cada Consejo Regulador desde el Centro de la Legumbre situado en Pajares de la Laguna.

Esta situación ha motivado que "la gente preocupe más de adquirir producto natural", considera Armenteros. "Esperemos que al menos esto sirva para que demandemos más producto local", desea.

Entre las ventajas de consumir legumbre de la tierra u otros productos del terreno, Nicolás Armenteros enumera las siguientes: "genera tejido económico y mantiene la población en el medio rural".

El director técnico de Legumbres de Calidad destaca el gran nivel del producto con el que trabajan al subrayar que "a nivel nacional tenemos unas legumbres de primera línea". Por ello invita al consumidor a "ser más consecuente con lo que compra, mirar más el etiquetado", con el fin de que "el sistema productivo nacional no se desmantele". En opinión de Armenteros, "demandar y consumir lo nuestro es garantía de supervivencia, porque en caso de crisis o cierre de fronteras podemos autoabastecernos". Este es uno de tantos motivos que pueden justificar el adquirir producto de cercanía. Otros pueden ser su contribución a la economía local, mantenimiento del empleo y de los pueblos.

Por ello, el director técnico de Legumbres de Calidad considera que esta situación ha motivado una reflexión con la que espera que "la sociedad vaya aprendiendo y sirva para mejorar la relación entre consumidores, productores,..-es decir, entre los eslabones de la cadena alimentaria-".