Una “maravillosa joya artística” en la iglesia de Villoria
El antiguo reloj, que puede datar del siglo XVI, aún se conserva en el templo aunque no se pudo reparar por falta de piezas
La iglesia de Villoria conserva en su interior tesoros interesantes con más o menos valor artístico, espiritual o sentimental. Entre las preciadas y valiosas piezas que custodian los robustos muros de este templo católico se encuentra el antiguo reloj, "una maravillosa joya artística", según se puede leer en un artículo escrito por Roberto Ábalos y dedicado al mismo en el número 3 de la revista Besana. Esta publicación está siendo puesta a disposición de todo el que quiera leerla por parte de los coordinadores de la actual Revista Digital Besana de Villoria. Cada cierto tiempo publican un nuevo número con el fin de ofrecer a los vecinos de la localidad un aliciente más en este tiempo de estar más en casa.
El antiguo reloj de la iglesia, "seguramente, se construyó allá por los años mil quinientos y pico" calculaba el autor de mencionado artículo, quizá "por las mismas fechas en que se remató el artesonado mudéjar de la iglesia, que según figura en el mismo, data de 1526".
El reloj de la iglesia de Villoria "está completamente forjado a mano", quizá por algún herrero de la localidad. Ábalos lo compara con el que existió en Cantalpino, "desaparecido", anota.
Cantalpino si conserva la maquinaria del antiguo reloj de la casa consistorial, expuesta en dicho edificio. En Cantalapiedra también se conserva la maquinaria del antiguo reloj de la iglesia en un rincón de la tribuna.
En dicho artículo se proponía al pueblo elegir una forma de restauración del mismo, aunque al parecer dicha recuperación no fue posible, "por no existir ya las piezas que necesitaba". Esta elegante pieza de artesanía que "latía y sonaba, marcando el ritmo de la vida" de antepasados aún se conserva en el interior de la iglesia parroquial de San Pedro de Villoria.