A pesar de ello, la presidenta, Magdalena Hernández, asegura los 50 internos están "muy bien atendidos", alaba la "generosidad y entrega de los trabajadores" y destaca que hay un contacto permanente con la Gerencia de Servicios Sociales
La crisis sanitaria del coronavirus está afectando de manera importante a las residencias de Salamanca. Una de ellas, es la de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer (AFA), cuya presidenta, Magdalena Hernández Mediero, afirma que está viviendo con "mucha angustia" estos "momentos difíciles".
"Estamos como cualquier otra residencia, con necesidades básicas", explica. Y es que "faltan mascarillas, batas, material...". Además, la plantilla se ha reducido en más de un 50%, debido a las bajas: "Los trabajadores tienen un gran espíritu de entrega, generosidad, una gran capacidad y vocación", por lo que "los enfermos están muy bien atendidos".
De momento, AFA no se plantea pedir refuerzos o voluntarios, ya que al haber cerrado los centros de día, se aprovecha ese plantilla. Además, el contacto es permanente con la Gerencia de Servicios Sociales y con el centro de salud correspondiente.
Este centro cuenta con 50 residentes en habitaciones individuales. Desde que se activaba el estado de alarma, las terapias y las comidas se realizan en cada una de esas estancias y salen para el paseo, que se hace de manera individual, para que no estén juntos. Ademas, según explicaba la presidenta de AFA, se mantiene un contacto con las familias a través de videollamadas.
Finalmente, la situación económica de AFA es otra preocupación. "Vivimos al día", apunta Magdalena Hernández, para añadir: "Esperemos que salgamos de esta".