La lectura: el mejor antivirus
Estamos en época de virus. Y frente a la incertidumbre causada por la sobreabundancia de información, a las dificultades para distinguir cuáles de los datos que recibimos son reales o no, y a la banalización de la actualidad que vivimos a través de las redes sociales, solo nos queda aplicar el mejor antivirus que conocemos: la lectura.
Leer no solo nos hace más libres, más creativos y más cultos sino que también nos ayuda a ser más críticos. En tiempos complicados, saber extraer la información más fiable de Internet, a la que algunos llaman la gran biblioteca sin bibliotecario, o diferenciar a los medios de comunicación objetivos frente a los que no lo son, nos ayudará a mantener la calma y a sobreponernos con inteligencia a cualquier situación. Por eso hoy os ofrecemos unas sencillas pautas que os pueden ayudar contra el virus más tenido de todos: la ignorancia que provoca la desinformación.
- 1. Busca siempre fuentes fiables que aporten datos con autoría reconocida, actualidad y la máxima objetividad posible.
- 2. No te quedes solo con un punto de vista. Si te preocupa el tema, compara, analiza, consulta distintas fuentes y extrae tus propias conclusiones aplicando el más importante de los sentidos que poseemos: el sentido común.
- 3. Ten en cuenta el medio en el cual se publica el contenido por si pudiese haber algún sesgo de información o de publicidad. ¿Twitter es un canal fiable? Depende del autor; ¿ y tu vecino del quinto? Lo mismo.
- 4. Recuerda siempre que el problema no son las cosas que pasan si no lo que hacemos con las cosas que pasan así que no contribuyas a alimentar bulos, no compartas información poco fiable o favorezcas el alarmismo.
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Somos humanos. Nos diferenciamos del resto de los animales por la palabra y nos gusta hablar y comunicarnos pero no podemos hacer de esta capacidad un arma de doble filo que nos haga engañarnos unos a los otros con tal de conseguir un puñado de seguidores en la Red. Tenemos tanta prisa que leemos por encima sin parar no a pensar si tiene sentido, si es fiable, si aporta algo lo leído, y contribuimos así a desinformarnos los unos a los otros. Si, como dijo Charles Spurgeon, "una mentira puede haber recorrido la mitad del mundo mientras la verdad está poniéndose los zapatos", la clave, como casi todo en esta vida, tiene que ver con tomarnos nuestro tiempo, aprender a leer nuestro entorno, a diferenciar el entretenimiento de la información y a ser críticos con todo lo que os rodea aplicando nuestro sentido común.
Ojalá que vosotros también os hayáis tomado vuestro tiempo para llegar al final de este artículo.
Feliz Domingo.
Rebeca Martín
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