Viernes, 10 de mayo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Los Padres Carmelitas festejan la Fiesta del Niño Jesús de Praga
X
Alba de Tormes

Los Padres Carmelitas festejan la Fiesta del Niño Jesús de Praga

Actualizado 19/01/2020
Pedro Zaballos / Manuel Diego

Tras la procesión se repartió como marca la tradición el bollo y la naranja del niño Jesús de Praga

Los Padres Carmelitas de Alba de Tormes celebraron esta mañana la Fiesta del Niño Jesús de Praga, una tradición recuperada hace tres años después de casi medio siglo sin celebrarse en la villa ducal.

Los actos comenzaron con la celebración de una eucaristía en la que se incluyó el reparto de estampas y la especial consagración a la imagen del niño Jesús de Praga. Posteriormente, se celebró la procesión de la imagen para finalizar con la tradicional entrega del bolo y la naranja.

Un poco de historia

En España entra la devoción al Niño de Praga con los Carmelitas a finales del siglo XIX, por influjo del Carmelo europeo, es decir después de los años de la exclaustración y desamortización (1836-1868). La restauración de la Orden Carmelitana en España viene de Francia (1868) por mano de los carmelitas españoles allí refugiados o que se iniciaron a la vida carmelitana en aquella nación. Y estos carmelitas, pertenecientes a la Congregación italiana, fueron los que trajeron la novedad de esta devoción que se fue acrecentando poco a poco, a medida que se iban restaurando conventos o inaugurando presencias nuevas. Podemos decir que era la devoción de moda en España por esas últimas décadas del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.

El convento de Alba de Tormes se restaura en el año 1877 (aunque siempre hubo frailes carmelitas exclaustrados en función de capellanes del sepulcro teresiano, que vivían fuera del convento), justo coincidiendo con la primera peregrinación teresiana de San Enrique de Ossó de agosto de aquel mismo año. En Alba se vio con mucho agrado y aprobación esta presencia ya oficial de frailes Carmelitas en su antiguo convento después de más de 40 años de ausencia.

Y fueron estos frailes restauradores los que trajeron a Alba la devoción al Niño Jesús de Praga, seguramente ya desde el momento inicial, aunque en aquellos primeros años todavía sin la oficialidad y el apoyo institucional de una cofradía del mismo nombre.

Gracias a que conservamos en el archivo conventual (debidamente ordenado) los libros oficiales, documentos y papeles de dicha cofradía pragense hoy podemos trazar con seguridad la historia más que centenaria de dicha institución eclesial y carmelitana, que no deja de ser parte de la gran historia de las cofradías en Alba de Tormes, un capítulo que aún está por escribir en forma documental y sistemática. A esta sección del archivo conventual (J-IV) nos remitimos para escribir estas páginas.

Precisamente sabemos por el libro registro de socios (J-IV-2) que la cofradía del Niño Jesús de Praga fue establecida "canónicamente" (no quiere decir que antes no existiera ya un culto propio y una cierta estructura) en la fecha de 26 de diciembre de 1909, que no es tardía, porque solamente dos años antes (1907) se había constituido la misma cofradía en la vecina Salamanca. Así se hace constar en dicho libro oficial, añadiendo además que ha sido posible gracias a la licencia escrita del obispo salmantino (22.12.1909). Las fechas hemos de considerarlas no como de apertura o comienzo de la devoción pragense en Alba, sino más bien como demostración y aprobación de algo que venía muy de atrás. Sirva de muestra el hecho de que el mismo obispo diocesano que la autoriza (F. J. Valdés), meses antes concede 50 días de indulgencia a quienes recen ante la imagen del N. Jesús de Praga de Alba (6.7.1909).

La constitución oficial de la cofradía tuvo su repercusión en las revistas carmelitanas españolas que registraban estos fastos. Así lo hace la revista "Monte Carmelo" de Burgos, que dice al respecto: "En esta religiosa villa venía celebrándose de muy atrás solemne octavario del Niño Jesús desde el día de la Natividad al de la Circuncisión [25 diciembre al 1 de enero]. Los Padres Carmelitas de Alba, en vista del incremento que la devoción al Niño Jesús de Praga va tomando en España, hanse aprovechado de estos cultos anuales que en su iglesia se celebran / para instalar la Archicofradía y nombrar Junta directiva, y lo han conseguido con gran éxito. El octavario ha resultado muy solemne y sobre toda ponderación grandioso el triduo con que terminó. Todos los niños y niñas de Alba han acudido a las hermosas funciones y han cantado con entusiasmo sin igual, himnos, villancicos, despedidas, motetes al Smo. Sacramento durante la Comunión general, la Misa de Angelis que la repitieron otros tres días, y una infinidad de cantos al Niño de Praga.

El último día de la función fue mucho más solemne. Durante la Misa de Comunión, el R.P. Simón preparó a los niños con ternísimos fervorines para el acto sagrado que iban a realizar; los niños entonaron con gusto el "Adoremus Sanctisimum Sacramentum" y "Laudate Dominum omnes gentes" antes de la Comunión, y la preciosa letrilla "Al Dios escondido", después de ella.

En la función de la tarde, después del brillantísimo y muy oportuno sermón del P. Simón, diéronse notas muy simpáticas en la iglesia del Carmen; tres niñas subieron al presbiterio para declamar con los primores de la inocencia sentidas poesías al Niño Jesús entre la emoción y lágrimas de los circunstantes; un niño desde el púlìto hizo el acto de consagración, terminando el acto con la adoración del Niño y cánticos sin fin.

Rifáronse después algunos objetos entre los niños y no hay que decir que el entusiasmo entonces rayó en delirio.

La Junta Directiva promete mucho de su piedad, celo y devoción al Niño Jesús de Praga.

Él la bendiga juntamente con toda la Asociación.- El corresponsal" (en revista "Monte Carmelo" 11 [1910] pp. 114-115).

Una suerte que nos haya llegado esta crónica fundacional tan esencial, a la que podemos añadir lo que años después se dice de la misma cofradía en Alba de Tormes y sus alrededores: "Alba de Tormes merece consideración aparte. Los Carmelitas de esta villa salmantina, custodios de las sagradas reliquias de santa Teresa, no se han contentado con reunir a las plantas del Pequeño-Grande los niños albenses, sino que le dieron a conocer en otros muchos lugares circunvecinos" (Alberto de la V. del Carmen, "Historia del milagroso Niño Jesús de Praga", Madrid, 1960, p. 189). Y esto es verdad porque en las iglesias parroquiales de los pueblos circunvecinos hemos encontrado tantas imágenes del Niño Jesús de Praga.

Fotos: Pedro Zaballos

Comentarios...