"Los niños tienen que recibir la misma atención psicológica que la madre víctima de maltrato", subrayan desde la Asociación de Ayuda a la Mujer Plaza Mayor
"A los menores hay que cuidarlos mucho, son víctimas directas". Los hijos e hijas de las mujeres víctimas de violencia de género pueden padecer las mismas secuelas que sus madres. "Sienten lo mismo, son un reflejo de su madre, y si está se siente insegura, el hijo/a también". Tal y apuntan desde la Asociación de Ayuda a la Mujer Plaza Mayor, "hemos avanzado, por ejemplo, en que si es hijo de víctima de violencia no requieren permiso para venir aquí, hasta hace nada necesitaban el permiso paterno para recibir atención psicológica".
Víctimas del maltrato, como testigos de lo sucede en su casa, pero también utilizados por el propio maltratador para hacer aún más daño a la mujer. "En muchas ocasiones, un padre que es consciente de que un golpe puede ser denunciado es más sutil, y utiliza a los hijos en contra permanentemente de la madre. Así hace daño a la mujer, pero sobre todo a los hijos a los que manipula".
"En el momento que haya una víctima de violencia de género, esos niños tienen que recibir la misma atención que la madre", apunta Jésica Joaquín, psicóloga de Plaza Mayor. "Considero que no tendría que haber visitas y habría que realizar un mayor y exhaustivo seguimiento".
Tampoco se puede obviar otra situación, nada excepcional, y es que "un gran número de víctimas de violencia de género que no denuncian utilizan la separación o divorcio como salida, pero a ese marido, si es un maltratador, no le van a negar las visitas a sus hijos. No estará considerado maltratador, pero sí lo es", subraya Iglesias.
Menores víctimas
Los datos sobre menores víctimas de violencia de género también deben hacernos reflexionar como sociedad. Desde enero de 2013, según datos de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, se han registrado 34 menores víctimas mortales (3 durante este año); y 273 menores han quedado huérfanos (41 en lo que va de año).