CBD: Qué es y cómo usarlo

Como es el caso con la mayoría de las plantas y hierbas que encontramos en la naturaleza, la planta de Marihuana también nos ofrece una sorprendente cantidad de beneficios que, hasta hace poco, habían sido eclipsados por el estatus ilegal -más el estigma que éste trae consigo- al que estuvo sujeta en casi todo el mundo.

Gracias a los esfuerzos de la gente que ha abogado en favor de esta planta y de todas las personas que podrían beneficiarse de ella, muchos países han reconocido los potentes efectos medicinales de esta planta y, entonces, abierto el mercado para la compra y venta legal de la planta y sus extractos. Justbob está entre las compañías que se dedica a la venta de cáñamo cbd online de la mayor calidad.

La noción de extraer medicina de una planta no es nueva, ni mucho menos; en un pasado distante todas las medicinas y venenos eran extraídas, y fabricadas a partir de todo tipo de plantas, flores, hierbas y semillas. La medicina natural es, en realidad, la medicina original. Es solo en tiempos modernos que la ciencia ha avanzado hasta un punto en el que muchos compuestos químicos pueden ser sintetizados en un laboratorio que nunca ve la luz del sol.

De Cannabis a CBD:

El CBD es el compuesto que más atención se ha ganado de parte de la comunidad médica-científica. Esto se debe a que el CBD es el compuesto químico que, entre los muchos que son encontrados en el Cannabis, presenta más potencial como medicina.

Cuando se habla de los compuestos químicos del Cannabis, los más importantes son el CBD y el THC. Para entender bien la diferencia entre estos dos, lo más fácil es verlos como mente, y cuerpo.

El THC sería la mente. La mayoría de sus efectos tienen que ver con el cerebro, la actividad cerebral y los cinco sentidos. El THC es lo que hace que se produzcan cambios en tus procesos cognitivos: Puede hacerte sentir feliz, de buen humor, entre otras cosas. También afecta tus cinco sentidos, otorgando gran sensibilidad auditiva, táctil, y visual. En resumen: El THC hace que todo se oiga mejor, que se sienta mejor, que se vea mejor, y que sepa mejor. Y que huela mejor, de paso.

El CBD, en cambio, sería el cuerpo. Este compuesto actúa sobre muchas áreas del cuerpo: Cuando te sientes relajado de repente, es gracias a las propiedades relajantes del CBD actuando sobre tus músculos. Disminuye también las sensaciones de dolor en todo el cuerpo. Para que te hagas una idea de todas los potenciales usos medicinales de este compuesto químico, aquí tienes una lista de algunas de sus muchas propiedades medicinales:

Es un vasodilatador, lo que ayuda a la circulación sanguínea. También es bueno para la salud de tu corazón.

Alivia las náuseas.

Está científicamente comprobado que disminuye la frecuencia e intensidad de los ataques epilépticos en gente que sufre de estos.

Disminuye la inflamación.

Es buena para la salud intestinal, ya que ayuda con la regularidad. (Esto, por cierto, era sabido ya en tiempos de la antigua Grecia, donde sugerían comer flores de Cannabis cuando se estaba estreñido)

Y muchos más. Es fácil hacerse una idea, después de saber esto, de lo importante que podría ser para la medicina moderna. Sin embargo, es aún muy difícil para muchos países legalizarla ya que, a causa del estatus ilegal que ha tenido por décadas, hay un vacío en literatura médica que podría tardar años todavía en llenarse para que hasta los doctores más tradicionales se vean forzados, de una vez por todas, a reconocer todos los beneficios de esta planta.

Cómo usar el CBD

La manera más natural de ingerir el CBD es definitivamente la mejor. Antes de comprar, hay que saber un poco sobre los dos tipos de plantas Cannabis más importantes:

Cannabis Sativa: La variedad Sativa (llamada simple y llanamente "Sativa" coloquialmente) es la que produce efectos más fuertes en tu mente. Contiene una mayor cantidad de THC que de CBD, y es más popular para uso recreacional.

Cannabis Indica: Esta variedad contiene, en contraste con la anterior, una gran cantidad de CBD y poco THC. Es la más usada por gente afligida por condiciones como dolores crónicos o epilepsia: Produce un efecto relajante acompañado por la desaparición de sensaciones dolorosas.

También es muy popular el uso de extractos, como el aceite de CBD. Este aceite es hecho a partir de plantas Indica que contienen concentraciones muy altas de CBD. Pero cada planta varía dependiendo de cómo ha sido cultivada y procesada: Es importante prestar atención a cuánto CBD contiene el aceite por ración: Niveles aceptables van de 50 miligramos a 1500 miligramos diarios.

Asegúrate siempre de la legitimidad del producto. El CBD sintético es usado por compañías ilegales y, al no ser natural ni regulado, puede ser cientos y hasta miles de veces más concentrado que el CBD natural.

Pero aunque llegues a excederte (que sería muy difícil), el CBD es muy seguro. No hay ninguna sobredosis documentada y, aunque podría llegar a sentarte muy mal, los efectos desaparecen en cuestión de un par de horas.

Así que olvídate de pasar malos tragos -literalmente- cada vez que tienes que tomarte una aspirina o un ibuprofeno: El CBD es natural, seguro, y aporta una experiencia mucho mejor que cualquier otro analgésico.