Este tipo de préstamos están diseñados para personas que necesitan dinero de forma rápida sin necesidad de tener que justificar una nómina o de tener que aportar alguna garantía o aval, como puede ser un vehículo o la vivienda familiar
Conseguir un préstamo o un crédito para poder acometer algún gasto extraordinario en casa es algo que desean cada día miles de familias en todo el país. Pero lo cierto es que, en buena parte de los casos, las familias encuentran una negativa por respuesta cuando acuden a su entidad bancaria de toda la vida en busca de esa financiación que necesitan.
Los estrictos estándares de solvencia crediticia que los bancos tienen en la actualidad imposibilitan a muchas personas a la hora de conseguir el dinero que necesitan para llevar a cabo cualquier proyecto personal. Por suerte, los conocidos como créditos rápidos se han convertido en una fuente de financiación cada vez más demandada gracias a su flexibilidad y la rapidez con la que el usuario dispone del dinero solicitado en su cuenta bancaria.
Los préstamos con ASNEF, uno de los más demandados
De entre la gran variedad de préstamos rápidos que se pueden encontrar son los préstamos con ASNEF los más solicitados por los consumidores. Y es que son muchos los motivos por los que los datos personales de un consumidor pueden terminar apareciendo en un fichero de morosidad como ASNEF que consultan las entidades bancarias antes de conceder un crédito a cualquier cliente.
En esta guía para obtener préstamos con asnef podemos descubrir cómo lograr un sí por respuesta cuando solicitamos un crédito estando inscrito en un registro de morosos. Y es que las entidades alternativas al sector bancario tradicional saben cuándo un cliente tiene capacidad para devolver un crédito y cuándo no, independientemente de que esté inscrito en un fichero como ASNEF.
Este tipo de préstamos suelen ser recomendados para personas que necesitan conseguir dinero de forma urgente, dada su rapidez en la concesión. Además se pueden pedir cómodamente a través de Internet, sin apenas papeleo y en cualquier momento del día. Existen muchas entidades en el sector de los préstamos rápidos, así que no resulta nada extraño conseguir que alguna ofrezca un sí por respuesta. Es habitual recibir el dinero solicitado el mismo día en el que se acepta la solicitud o, como mucho, a las 24 horas.
¿Créditos rápidos sin aval ni nómina?
Además de por la posibilidad de estar inscrito en un registro de morosidad por una deuda del pasado, también son otros los motivos por los que las entidades bancarias deniegan la concesión de créditos a sus clientes. Entre estos motivos destacan por su importancia el hecho de no tener una nómina regular o no tener una propiedad con la que avalar la operación.
Los creditos rapidos sin nomina ni aval ni propiedades también han logrado hacerse con un hueco muy interesante en el mercado. Y es que, aunque parezca que están dirigidos a personas en situación de insolvencia, lo cierto es que son muchos los clientes que atraviesan una situación temporal sin nómina y que, sin embargo, pueden hacer frente a la devolución del préstamo.
Este tipo de préstamos están diseñados para personas que necesitan dinero de forma rápida sin necesidad de tener que justificar una nómina o de tener que aportar alguna garantía o aval, como puede ser un vehículo o la vivienda familiar. Tan solo hay que acreditar alguna fuente de ingresos recurrentes para poder demostrar que se cuenta con capacidad para devolver el préstamo. Esto aplica a trabajadores autónomos, trabajadores que cobran una prestación por desempleo e incluso pensionistas jubilados.
E incluso es posible encontrar entidades que conceden este tipo de préstamos cuando no se tiene ningún ingreso fijo, aunque esto dependerá de la capacidad de la entidad para conceder préstamos a este nivel de riesgo. En cualquier caso, no es imposible encontrar entidades que ofrecen créditos rápidos sin necesidad de acreditar ingresos regulares en la solicitud.
Una solución para todo tipo de personas
Como se puede apreciar, los préstamos o créditos rápidos constituyen una fuente de financiación alternativa a la banca tradicional. Las entidades que operan en este sector ayudan cada año a miles de clientes a conseguir sus objetivos y juegan un papel clave para que amplios sectores de la población no queden marginados del acceso a la financiación.
Y es que ya sea para costear la reparación de una avería en el vehículo familiar, para realizar una compra de un electrodoméstico o para hacer una reforma en casa, este tipo de créditos rápidos resultan flexibles y fáciles de conseguir por la gran mayoría de la población.