El Comité Ecologista apoya esta declaración argumentando que afecta al paso de numerosas personas, incluidos turistas
El Comité Antinuclear y Ecologista de Salamanca apoya la declaración que vecinos de la Rúa Mayor han difundido sobre la instalación de las terrazas en su calle, en la que solicitan que se retiren. "Pero es que, además, no se trata sólo del vecindario del entorno de la Rúa, sino que afecta a numerosas personas de la ciudad que han dejado de pasar por esta calle o procuran evitarla", argumentan desde la asociación ecologista.
"El mismo turismo también se ve afectado y no creemos que a muchos turistas les den ganas de volver a una ciudad que no cumple los mínimos estándares de confort", añaden.
Por otro lado, se refieren a la "necesidad de replantearse el sistema de limpieza de las calles debido al excesivo ruido de la maquinaria que utiliza le empresa contratada por el Ayuntamiento, así como su horario de trabajo, que rompe el horario de silencio establecido en la ordenanza contra el ruido".
Comunicado de Vecinos de la calle de la Rúa Mayor
Consideramos que la proliferación de terrazas, que ha ido invadiendo cada año más espacio público (calles y plazas), acarrea una serie de problemas que detallamos a continuación:
1. Uso de un espacio público (propiedad de los ciudadanos) para fines comerciales privados, limitando y condicionando el espacio de uso y disfrute público, y dificultando notablemente el tránsito de las personas.
2. El tráfico por la mañana (desde las 8-11 h) es caótico y peligroso. El paso habitual de peatones, estudiantes, turistas (grupos) se hace prácticamente imposible y peligroso. Los peatones que osan caminar por esta calle tienen que sortear diferentes obstáculos:
- Desde primera hora de la mañana (8 h), mesas, sillas y otros objetos de la hostelería se apilan contra las paredes, ocupando un espacio equivalente a una acera de al menos 1 metro de ancho, esperando a que llegue la hora del despliegue en la calle.
- Los vehículos que acceden a la calle, desde ambos sentidos, no tienen limitación de tamaño ni peso, lo que añade un riesgo de daño tanto para peatones (que o buscan otras calles para pasar, o van sorteando como pueden a los vehículos), como para el pavimento (que está en permanente reparación).
- Los vehículos de carga y descarga (CyD) estacionan a ambos lados, cerrando aún más el paso a los peatones
- Vehículos asociados a los establecimientos, o de servicios, sin que nada tengan que ver con la CyD, permanecen estacionados todo el tiempo, donde les parece, o pueden, ocupándose ya la práctica totalidad del espacio de paso.
- Por el espacio libre del centro de la calle circulan los vehículos en ambos sentidos, sorteando a su paso a los estacionados o a los vehículos que circulan en sentido contrario, y a los peatones que se encuentran de frente o de espaldas (con la consiguiente preocupación y susto para los peatones).
- Así mismo, desde las calles aledañas, acceden a la calle vehículos de paso, que buscan un recorrido más corto para ir de un destino a otro, sin que haya dirección obligatoria o prohibida alguna para ellos.
3. El despliegue de las terrazas tiene lugar a partir de las 11 h. En un movimiento transversal al sentido de circulación peatonal, y sorteando el paso de peatones hasta donde es posible, se inicia un traslado de mesas, sillas y objetos múltiples al centro de la calle.
- Se empieza por acotar el espacio (cercado) con jardineras, cartelería, marquesinas móviles, vallas, mátiles, toldos, ? en sentido longitudinal, de manera que los peatones no puedan pasar, en caso de necesidad, a través del espacio libre (paso) entre las filas de las terrazas.
- Se colocan las mesas y sillas justo en el límite señalizado (concesión municipal de módulos de 30 m2, frente a los 18 m2 habituales, lo que hace una densidad de ocupación impropia de esta calle), de manera que en cuanto son ocupadas por el público se extienden más allá del limite, reduciendo aún más el paso libre dejado para los peatones, de manera que la superficie real puede llegar a los 4-5 m en sentido transversal.
- Así permanecen todo el día, y la práctica totalidad de los días del año, extendiéndose aún más cuando hay agrupamientos de usuarios, o derivado de la dejación con el paso del tiempo.
- A la vez, mobiliario de reserva suele estar apilado junto a las paredes esperando su uso, e igualmente es habitual la instalación de muebles auxiliares, cartelería, etc, en la calle o junto al establecimiento, al que ha de acceder de continuo el personal de servicio, ocupando aún más espacio público, y dando lugar a conflictos con los peatones.
- El despliegue de sombrillas ha ido creciendo en tamaño, altura y volumen, ocupando la práctica totalidad de la superficie (ocupación de suelo y cielo), con anclajes al suelo (pavimento de especial protección), en un despliegue propio de un ferial, y no de una calle histórica y patrimonial.
- Como complemento a esta ocupación del espacio público está la presencia de músicos (los llamados callejeros) y otros que despliegan en la calle sus artilugios, con sistemas de amplificación del sonido, a la vez que pasan máquinas aspiradoras con un ruido excesivo (en una zona declarada de especial protección acústica).
4. Tras la finalización de la jornada (23-24 h, o 1-2 de la madrugada, según el día), viene la recogida del mobiliario desplegado y la limpieza.
- Ruidos de golpes derivados del apilamiento de sillas y mesas, del arrastre sobre el suelo de estas pilas hasta el interior del establecimiento (que sirve de almacén), y de la recogida de todos los objetos de vallado o publicidad desplegados.
- Frente a la Casa de las Conchas (monumento destacado de la ciudad, y cultural como biblioteca pública), permanece acumulada la basura en el entorno de los contenedores.
- Sucesivos camiones de la basura, con motores de combustión en marcha, luces, y voces de los usuarios, recogen, en diferentes tiempos, cartones, bolsas, y demás objetos depositados, y finalmente los contenedores, lo que puede suponer 1-2 h de movimiento y ruido.
- Mientras, a partir de la 1 h de la madrugada, están actuando las máquinas barredoras, también con motores de combustión, generando un ruido excesivo que excede lo prescrito por la propia ordenanza municipal sobre ruidos. Recorren la calle una y otra vez, en un sentido y otro, unas veces barriendo, otras veces de paso, volviendo varias veces por el mismo sitio, si entre una y otra pasada ha habido alguna novedad.
- Siguen las máquinas fregadoras, en operación semejante. Además de la necesidad de ir a cargar sus tanques de agua a uno u otro extremo de la calle, para seguir con su labor de limpieza en las calles aledañas u otras.
- Continúan las máquinas de riego, con mangueras de presión. E igualmente van y vienen, a cargar agua en los diferentes surtidores de la calle, cuando procede.
- El cierre de los establecimientos de ocio (bares o disco bares) suele ir acompañado de la correspondiente charla y despedida del personal, en plena calle, y el uso de vehículos motorizados para su desplazamiento, que a esas horas de la madrugada circulan libremente por la calle.
- A todo ello hay que sumar el paso de grupos de peatones, que no se caracterizan por su discreción
- Toda esta actividad nocturna en esta calle persiste a lo largo de toda la noche, y enlaza prácticamente cada día, con una nueva jornada matinal. De especial relevancia son los fines de semana, festivos, y vísperas.
Igualmente queremos transmitir nuestro rechazo total a la instalación de casetas, con motivo de la llamada "Feria de día", por razones de SALUD, HIGIENE, SEGURIDAD, SENSIBILIDAD Y RESPETO.
Tras la descripción de hechos, formulamos la siguientes SUGERENCIAS y/o PROPUESTAS
1. Respecto a las TERRAZAS
- Dadas las especiales características de esta calle, de especial relevancia para su tradicional uso y disfrute del ciudadano (gran número de ciudadanos viene a pasear a diario por la Rúa Mayor entre su comienzo y la catedral), y de prioritario paso peatonal hacia la zona monumental, histórica, y educativa (varias facultades universitarias) de la ciudad, debería estar totalmente libre de obstáculos, por lo que consideramos que no debe autorizarse el despliegue de dichas terrazas.
- En el caso de que otras razones se impongan, el despliegue de terrazas debe limitarse a la superficie inmediata a la fechada del establecimiento, ocupando en extensión longitudinal el espacio de fachada de que disponga el local correspondiente, y transversalmente el equivalente a una sola fila de mesas/sillas, de manera que no supere más que el espacio equivalente a una acera (actualmente la calle tiene perfectamente marcado este espacio), dejando libre el centro de la calle. Con ello se facilitaría:
· El transito de peatones, y útiles necesarios (carritos de niños, vehículos y sillas de minusválidos, ?), el paso relajado, de convivencia y de disfrute de los ciudadanos de un espacio que le pertenece, y que no tiene que verse abocado a recorrer de manera apresurada, en fila india, sorteando un continuo de obstáculos.
· El acceso de vehículos de emergencias (policía, servicios médicos, ambulancia, bomberos, funeraria, ?). De todo ello hay muestras en el tiempo.
· El libre acceso a otros establecimientos comerciales, y el disfrute de sus ofertas y escaparates
· El libre acceso a los portales de viviendas.
· Se evitaría el continuo ir y venir de los camareros, en sentido transversal al movimiento peatonal, obstaculizando el paso de peatones, y evitando situaciones de enfrentamientos.
2. Respecto al TRÁFICO (CyD)
- Reservar una zona de paso peatonal.
- Limitar el acceso de vehículos en volumen y peso.
- Fijar un único sentido de circulación.
- Vigilar que el estacionamiento sea por motivos de CyD, limitado al tiempo necesario para hacer el servicio.
- Imposición de vehículos con motorización eléctrica, que eliminen contaminación ambiental y de ruido.
3. Respecto a la LIMPIEZA
- Establecer un horario racional, de manera que se garantice un mínimo de normalidad, y de silencio, para el descanso de los vecinos.
- Coordinar los servicios de limpieza, para una mayor eficiencia, y eliminación de molestias por ruido.
- Limitar el uso de la calle a los servicios imprescindibles, impidiendo su uso como vía de tránsito desde las calles aledañas, o desde la calle Quintana dirección a Serranos-Vaguada, como hacen los camiones de basura, o los de carga de agua.
- Utilizar vehículos con motores eléctricos, y no de combustión, fuentes de contaminación acústica y ambiental, haciendo gala de la publicidad que ostentan "Salamanca, culta y limpia", "Salamanca, patrimonio limpio", y en justa coherencia y ejemplaridad con lo que se dispone institucionalmente.
4. Sobre las CASETAS DE FERIA
- Exigimos su total retirada, como ha venido haciéndose con otras, ubicadas en c/Compañía, Monterrey, Colón, Anaya, ?, por razones de contaminación (acústica, medioambiental, visual, ?), de sanidad e higiene, de seguridad, de coherencia, de buen gusto, de respeto a los vecinos que desean estar tranquilos y descansar en sus viviendas y por extensión a los ciudadanos, que desean pasear tranquilamente, y no verse involucrados en un ferial tumultuoso.
- La feria debe tener, y lo tiene, su propio habitáculo (Recinto ferial), de manera que el ciudadano que guste de ella puede desplazarse al lugar, y no convertir el centro histórico en un ferial comercial, donde todo vale (música sin limitación de volumen, traslado de platos cocinados por la calle hasta las casetas, falta de higiene y control sanitario en los expositores de pinchos, a diferencia de los exhaustivos controles en otros establecimientos, prácticas manipuladoras de alimentos indescriptibles y no higiénicas (de las que hay constancia), comida y bebida servida en plena calle entre el paso indiscriminado de peatones, acumulación de bombonas de butano, con el consiguiente peligro, etc).
- En todo caso, si las Ferias y Fiestas son de la ciudad, hágase partícipe a toda la ciudad, instalando estos chiringuitos por diferentes zonas (barrios), de modo rotatorio, y no polarizándolos siempre en el mismo sitio, y bajo las ventanas de las viviendas de los vecinos.
5. Pedimos que, en vez de destinar el espacio público al uso y beneficio comercial particular, se instalen más bancos públicos, con zonas de sombra natural, y ambientes refrescantes (fuentes con agua), para uso y disfrute de los ciudadanos. Todo ello en coherencia con la ciudad culta, limpia, histórica y patrimonial que se publicita.
6. La problemática descrita en la C/Rúa Mayor, es extensible a otras muchas zonas del casco antiguo (y más allá):
- PZA MAYOR: Los accesos por Corrillo, calle Toro, calle Concejo, ? son escandalosos. El acceso a los soportales, la visión de los medallones y otros aspectos artísticos de la plaza, es prácticamente imposible; la ocupación de los soportales por mobiliario de la hostelería y la extensión y ocupación por las terrazas en días de lluvia son un hecho preocupante, que incumplen la normativa, y sin embargo se permite; la falta de asientos públicos adecuados es una desconsideración y falta de respeto al ciudadano, que queriendo disfrutar de su plaza, o necesitando descansar, no puede, salvo que pague de nuevo por ello.
- PZA LIBERTAD: El despliegue de terrazas por sus laterales dificultan el paso de personas, e impiden acceder a los asientos perimetrales del jardín.
- PZA CORRILLO: La dificultad de desde la plaza Mayor, y la ocupación de esta, son una realidad.
- PZA POETA IGLESIAS: Ocupada toda ella por terrazas, sin ningún banco públicos, ni sombra natural, o la presencia de fuentes (agua), que contrarresten tanto granito.
- CALLE MELENDEZ: Ocupación del espacio público, más allá del autorizado, con despliegue de todo tipo de artículos feriales y festeros, impropio de una zona monumental, y en conflicto con el comercio local.
- OTRAS CALLES: Palominos, S.Pablo, Poeta Iglesias, Sánchez Barbero, Felipe Espino, etc, ocupando las aceras, o la calle en su conjunto, y haciendo que los peatones tengan que ir sorteando obstáculos, dificultando el paso de los minusválidos, etc.