Vivir con dolor crónico, una enfermedad que afecta al 11% de la población

Un dolor que se mantiene de forma aguda durante más de 6 meses y que no responde al tratamiento médico habitual. Es lo que se conoce como dolor crónico y que en España padece el 11% de la población, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), es decir, más de 5 millones de personas, y de estas, en casi la mitad de los casos se debe al dolor neuropático, consecuencia directa de una lesión o enfermedad que afecta al sistema somatosensorial.

Datos que, coincidiendo este jueves con el Día Mundial del Dolor, ponen de relieve la importancia de concienciar sobre lo que significa vivir con dolor crónico, un problema sociosanitario de gran envergadura. Más del 85% de los pacientes presenten un deterioro significativo en su calidad de vida y más del 70% presenta algún tipo de alteración psiquiátrica, principalmente ansiedad o depresión. Se calcula que actualmente el 50% de los pacientes lo consigue reducir en casi un 30-40%, pero que entre un 40-70% no consiguen un control completo.

Generalmente los pacientes precisan dos o más fármacos, además de llevar a cabo otras opciones terapéuticas alternativas no farmacológicas -fisioterapia, tratamiento psicológico, terapia cognitivo-conductual?-, para convivir con el dolor.

Causas

Ciertas patologías neurológicas, infecciones, traumatismos, diabetes y cáncer suelen ser las principales causas de la aparición del dolor neuropático, tal y como exponen desde la SEN. Aunque también puede surgir como una consecuencia postoperatoria, llegando a afectar a entre el 5 y el 85% -dependiendo del tipo de cirugía- de las personas a las que se les realiza una operación quirúrgica.

Dolor neuropático: síntomas

Afecta de forma importante a la calidad de vida del paciente. Los principales síntomas del dolor neuropático son:

• Dolores similares a una corriente eléctrica o quemazón o pinchazos ante estímulos comunes.
• Alteraciones del sueño.
• Cansancio.
• Pérdida de concentración.
• Puede afectar al estado de ánimo, la personalidad y las relaciones familiares y sociales del paciente.